No solo las tarifas de los ómnibus son la causa de las masivas manifestaciones en las calles de al menos 100 ciudades de Brasil. El jueves una marea humana de un millón de personas se lanzó a protestar.

La corrupción de los políticos, los privilegios para estos, desorden en educación y salud, llevaron a los manifestantes a las calles el jueves, sin respuesta ni solución a la vista, dice BBC Mundo.

Y añade : “Dos preguntas simples sobrevolarán ese encuentro: ¿por qué aumenta la revuelta popular en un país que era presentado como modelo de progreso económico y social? ¿Y qué puede hacerse para apaciguar la situación?

Y todo indica que ninguna de las dos interrogantes tiene respuesta simple para las autoridades brasileñas”.