La periodista Yolanda Monge de El País, Madrid, acaba de visitar el penal que mantiene el ejército de EE.UU. en Guantánamo, Cuba, donde permanecen prisioneros unos 166 implicados en actividades terroristas. Desde febrero, decenas de ellos, se estima que unos 104, se mantienen en huelga de hambre. Aunque la reportera no tuvo acceso a los detenidos, sí conversó con los encargados de la prisión que le describieron las condiciones en que alimentan “a la fuerza” a los internos. Resultado: un impactante reportaje sobre las condiciones de tratamiento a los prisioneros en el polémico presidio militar estadounidense cuyo cierre, prometido por el presidente Obama, se ha convertido en un laberinto sin salida para su administración. Dice la periodista Monge: “Sobre Guantánamo solo se sabe una parte de la historia, la que las autoridades militares quieren contar y que, en un acto de circense transparencia, publicitan con las visitas al penal, indeleble mancha en el historial de derechos humanos de Estados Unidos. La prensa no tiene acceso a los presos, 86 de los cuales han obtenido el visto bueno para poder abandonar la isla y ser transferidos a terceros países y, sin embargo, ven los días pasar sin que nada suceda. Algunos llevan 10 años encerrados sin cargos. De los 166 que quedan —a mediados de la década pasada llegó a haber cerca de 600—, 151 están calificados bajo la etiqueta “bajo valor”.