Sugestiva crónica del reportero Vicente Jiménez de El País, Madrid, sobre gestiones diplomáticas confidenciales del desaparecido autor colombiano Gabriel García Márquez para mediar entre el régimen de La Habana y la Casa Blanca. Esas andanzas salen a relucir en el libro Back Channel to Cuba recién publicado por los autores, investigadores William M. Leogrande y Peter Kornbluh.
“García Márquez y Clinton se sentaron juntos. El escritor intentó seducir a su interlocutor. Le habló de la psicología de Castro, de cómo acercarse a él y de las muchas concesiones que había hecho (tibias medidas de apertura, retirada de Angola…). Los latinoamericanos presentes destacaron que un acercamiento entre EE UU y Cubamermaría la influencia de Castro. “Intenta entenderte con Fidel, él tiene muy buena opinión de ti”, le aconsejó le escritor. Clinton no picó. “Al principio fue educado, pero al ver que estaba en una emboscada, dejó de escuchar”, recordó Williams Luers, secretario de Estado adjunto para Latinoamerica, presente en la cena. “Clinton simplemente se giró”, recordó Rose Styron, según la crónica.