Julio E. Muñoz | @julioemunoz | Ex Director Ejecutivo SIP
Uno de los grandes desafíos que enfrenta la industria del periódico es como adaptar sus contenidos a la era digital. De cuando en cuando, la tecnología nos hace reevaluar nuestros modelos de negocios y nos obliga a repensar las estrategias que hasta ahora habían funcionado en forma óptima. Hoy, la pregunta que se hacen los editores es si los contenidos que producen son los indicados para atraer a las audiencias, que ofrece el mercado de los medios digitales.
Por cierto, esta situación no es inédita en la historia de los medios de comunicación. Por ejemplo, cuando Allen Neuharth, un visionario del periodismo, fundó en 1982 el USA Today, lo hizo como una respuesta a la prominencia que había adquirido la televisión como fuente de noticias. Él lo denominó periodismo de la esperanza y su objetivo era llegar a audiencias jóvenes, que preferían informarse en la televisión en lugar de en los diarios tradicionales.
La propuesta fue exitosa. Y la receta de noticias cortas, sin pases de una página a otra, con títulos atractivos complementados con ilustraciones gráficas y muchas fotos a color, se convirtió en el estándar del periodismo mundial y llegó a pelear el primer puesto con el NY Times y el Wall Street Journal. El USA Today era el más rápido en entregar las noticias, ya que disponía de 36 plantas impresoras en todo el mundo, y el ingenio innovador llegó incluso a diseñar las máquinas de venta del diario con la forma de un televisor.
Pero hoy los desafíos son distintos.
El creciente uso de dispositivos móviles obliga a los medios a adaptar sus contenidos, tanto en la forma como en el fondo, para ser fácilmente consumidos por los usuarios. Una de las estrategias es poder cautivar a las generaciones más jóvenes, especialmente a los denominados Millennials.
Ya el mensaje no es sólo escrito, ahora es completamente multimedia, con especial relevancia en los formatos de vídeo. Por ejemplo el diario noruego Verdens Gang, lanzó Linear TV, un canal informativo en Internet, cuyos contenidos, especialmente dirigidos a las generaciones más jóvenes, se pueden consumir desde cualquier tipo de dispositivo conectado (smartphones, tablets, PC, smartTV,…). Esta “estación de televisión” ya alcanza al 40% de la población de Noruega y el 70% de su audiencia media semanal está entre los 15 y los 40 años.
El centro del negocio es siempre el mismo: noticias, buenas y malas, noticias en profundidad, noticias con perspectiva y noticias que lleguen en forma clara, directa y rápida. La noticia siempre será el centro del trabajo periodístico, pero con su formato adaptado al soporte en el que los usuarios lo quieren consumir.
El enfoque de Neuharth fue esencial en un momento de la historia. Hoy requiere una evolución hacia la realidad del entorno digital. Quién pueda adaptar un medio con esas características, quizás esté escribiendo el capítulo dos de la historia de Neuharth, y, si lo consigue, seguro que ocupará un lugar entre los grandes innovadores del mundo del periodismo.
*Julio E. Muñoz es Profesor Visitante en Libertad de Expresión en el College of Law de American University, en Washington, DC.