El cimbronazo que le pegó el Departamento del Tesoro de EE. UU. a uno de los mayores emporios empresariales de Panamá, Grupo Waked, al vincular a sus principales cabezas al lavado de bienes del narcotráfico, hace temer a las autoridades de dicho país por el empleo de miles de personas en las 68 compañías investigadas, dice el diario La Prensa.
El presidente de la República, Juan Carlos Varela, ordenó –según dicho diario– la creación de una lista con la identidad de los empleados del emporio Waked, cinco días después de la la inclusión de estas empresas en la lista Clinton, por sus supuestos vínculos a actividades relacionadas con el tráfico internacional de narcóticos y lavado de dinero.
“He dado instrucciones al ministro del Trabajo, Luis Ernesto Carles, para identificar cuántos trabajadores (tiene el grupo Waked) y sus nombres. (Este censo) es para darles todo el respaldo que sea necesario”, indicó el mandatario en un acto oficial celebrado en la antigua base Rodman, informó La Prensa.
Para tratar el caso Waked, añade, tres ministros integran una mesa de negociación junto a dos representantes de la familia Waked y funcionarios del gobierno de Estados Unidos.
El equipo gubernamental está integrado por los ministros Dulcidio De La Guardia, Augusto Arosemena y Luis Ernesto Carles, de Economía y Finanzas (MEF), de Comercio e Industrias (Mici) y de Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel), respectivamente.