“No lo secuestré, no lo torturé y no lo maté. Sí estuve en ese lugar (del crimen), ésa fue mi participación, nada más, estar en el lugar equivocado” dijo el capo narco mexicano Rafael Caro Quintero al negar su relación con el asesinato del agente de la DEA Enrique Camarena en 1985 por el que descontó 29 años en prisión, según una entrevista videograbada en exclusiva con la revista Proceso de Ciudad México.
En entrevista con la periodista Anabel Hernández experta en temas del narcotráfico de Proceso, Caro Quintero pidió perdón a la sociedad mexicana, a la DEA y al gobierno de EU y sentencia: “No estoy en guerra con nadie; El Chapo y El Mayo son mis amigos”, detalla el sitio proceso.com.mx.
Proceso afirma que la entrevista con el capo se efectuó en la clandestinidad y será transmitida en Proceso TV este lunes a las 12 horas por proceso.com.mx.
Camarena era un agente de la DEA que se infiltró en el cártel del Guadalajara y, tras ser descubierto, fue torturado y golpeado una y otra vez mientras un médico le mantenía con vidaen una finca de la organización de Caro Quintero. Cuando su cuerpo fue recuperado, se descubrió que había sido castrado y enterrado vivo, destaca un informe del diario La Prensa de San Pedro Sula.
‘El narco de narcos’ afirma que perdió todas sus riquezas tras permanecer más de 20 años en la cárcel. Mira todas sus revelaciones en su primera entrevista desde la clandestinidad, según La Prensa.
En 1985, en su huída tras el asesinato de Camarena, Caro apareció sorpresivamente en Costa Rica junto a su amante Sara Cosío y otros cómplices. Fue detectado por un comando de agentes policiales costarricenses, alertados por la DEA, en una mansión cerca del aeropuerto Santamaría.
Todos fueron detenidos y expulsados en cuestión de horas por orden de autoridades del Poder Ejecutivo “entre ellas, Hugo Alfonso Muñóz Quesada, porque Rafael Caro Quintero había ingresado ilegalmente. Quien ingresa ilegalmente, es deportado”, aclaró el magistrado Fernando Cruz Castro, quien entonces fungía como Fiscal General de la República.
“La DEA siempre afirmó que era el autor intelectual de la muerte de Camarena”, precisó el magistrado castro Cruz.