El volcán Turrialba, uno de los más activos del país, arrancó el 2017 con emanación constante aunque pasiva de ceniza cuya pluma apenas sobrepasó los 500 metros de altura por encima del cráter activo y su caída se reportó en diversas localidades del Valle Central, informó la Red Sismológica Nacional.
La ceniza se dispersó a lo largo del día hacia el Oeste, Suroeste y Noroeste.
La mañana de este martes, la dirección del viento fue dominante hacia el Noroeste, con mayor afectación al norte del volcán Irazú y del Valle Central según se observó desde las cámaras de vigilancia de la Red y conforme los datos de la estación del Instituto Meteorológico Nacional en la cima, añade el informe.
El tremor volcánico -señal sísmica- se mantuvo con amplitud moderada. La Red Sismológica está al tanto de la evolución de la actividad del coloso, dijo el Dr. Mauricio M. Mora de la Red.
A las 5 p.m., Mora posteó en Facebook el siguiente informe: “Durante todo el día de hoy el volcán mantuvo una emisión pasiva de ceniza casi constante acompañada de tremor volcánico cuya amplitud disminuyó ligeramente a eso de las 3 p.m”.
Este comportamiento lo registraron los sismómetros y cámaras de vigilancia de la Red en el macizo. Las condiciones favorables de viento y condiciones más secas propiciaron una mayor caída de ceniza y persistencia de material en el Valle Central. El viento sopló con dirección Noroeste y Oeste durante el día según los datos del Meteorológico, agregó el experto.
Según Ovsicori, el volcán tuvo actividad constante con emanaciones pasivas de vapor de agua, gas y ceniza. Las columnas variaron su altura debido a los cambios en la dirección del viento en la cima del Volcán (con velocidades entre 5 y 35 km/h) con una dirección predominando hacia el oeste y noroeste.
El tremor volcánico -señal sísmica- se mantuvo casi homogéneo con algunos pulsos continuos de emanación de gases, vapor de agua y ceniza destacables a las 4:30 am y 5:05 am.
Se reportó caída de ceniza en algunas localidades del Valle Central (Barva, Moravia, Santa Bárbara, Pavas, San Francisco de Heredia, Guadalupe, Coronado, Santo Domingo, Tibás, Escazú, Heredia Centro), agregó el Ovsicori.
Desde octubre 2014
“El Turrialba es uno de los volcanes más activos de Costa Rica. Su último ciclo eruptivo inició en octubre de 2014, presentando la mayor actividad entre mayo y junio de 2016, incluyendo al menos tres erupciones estrombolianas en dicho periodo, la más reciente el 20 de mayo de 2016, cuya pluma alcanzó los 3.000 m sobre el nivel del cráter, así como numerosas erupciones freáticas alternadas con episodios de calma. El 22 de septiembre de 2016 registró la erupción más potente que haya experimentado en los últimos 20 años”, reseña Wikipedia.