El abrupto cierre de la señal de la cadena internacional de noticias CNN por el régimen de Nicolás Maduro no pasó inadvertido para el gobierno en San José que censuró la decisión.
“Vemos con sincera preocupación las medidas adoptadas por el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela de bloquear la señal internacional de un canal de noticias e insta respetuosamente garantizar el legítimo ejercicio del derecho de la ciudadanía a recibir información por cualquier medio de comunicación”, advirtió el Ministerio de Relaciones Exteriores en un inusual comunicado difundido el jueves.
El gobierno de San José reaccionó, así, de manera inmediata ante una decisión tomada en Caracas frente a medios de comunicación, aunque el régimen chavista ha clausurado decenas de periódicos, telenoticieros y espacios radiales opositores.
Hasta ahora la administración Solís ha observado una discreta posición frente al galopante deterioro institucional de la nación bolivariana, sumando sus manifestaciones a las de la comunidad internacional.
Golpe a CNN
Tras el bloqueo de la señal de CNN, el gobierno de Solís aludió, bajo el título Bloqueo a señal internacional de canal de noticias, a los llamados de atención de la Relatoría para la Libertad de Expresión de la Organización de los Estados Americanos (OEA) “en cuanto al deterioro de la libertad de expresión y de prensa en nuestra región”.
La Cancillería tica se refirió, en particular, al informe del Relator Especial Édison Lanza, en el marco de su participación en la Asamblea General del Sistema Interamericano de Prensa del 2015, quien sostuvo “la situación de la libertad de prensa y la concentración de medios ha empeorado en Latinoamérica”.
“Costa Rica en apego a sus principios y valores democráticos aboga por un amplio acceso a la información y por un respeto absoluto a la libertad de expresión, ya que es de importancia capital para cualquier sociedad democrática”, dijo la Cancillería.
Y en ese marco cuestionó el bloqueo del régimen de Caracas a CNN.
En la Asamblea Legislativa de San José también se aprobó, por ajustada votación, una moción de censura al régimen de Maduro.
Caracas ordenó el bloqueo de CNN al denunciar un informe investigativo que vinculó a altos cargos del régimen, entre ellos al vicepresidente Tareck El Aissami — señalado por el Departamento del Tesoro de EE.UU. con vínculos al narcotráfico internacional– como proveedores de pasaportes a terroristas de Hesbollá.