Bayardo Arce es el poder detrás del trono en Nicaragua, eso sí después de Rosario Murillo, la mujer del comandante y hoy poderosa vicepresidenta…
Experiodista, exguerrillero, exdiputado, acaudalado empresario, quien –según el diario La Prensa– es dueño de una mansión de un millón de dólares, contacto clave con la cúpula de los hombres de negocios y empresas y, hasta ahora, el principal asesor económico del presidente Daniel Ortega, el, también “comandante”, Bayardo Arce, no se lleva de lo mejor con la Murillo –el real poder detrás del trono– dice un informe especial de dicho medio.
“Hoy se les ve sonriendo en público, pero en privado no se llevan bien. “Rosario no lo tolera. Arce irrita a Rosario”, dice una fuente del sandinismo que prefiere el anonimato. “Es que Murillo no es fácil, es de un trato incómodo”, dijo al diario el excomandante Henry Ruiz, hoy crítico del régimen dinástico orteguista.
“A Bayardo Arce se le considera uno de los hombres más ricos de Nicaragua. La Prensa develó en 2009 que el comandante levantó una hermosa mansión en un alejado y tranquilo paraje ubicado al sur de Managua, contiguo al camino que lleva hasta San Isidro de la Cruz Verde. La extensa propiedad tiene dos entradas. Una por el camino al que se ingresa a San Isidro y la otra unos 300 metros al sur del colegio Mont Berkeley. La mansión tiene unos 800 metros cuadrados de construcción. El valor estimado del inmueble es cercano al millón de dólares”, añade el informe del periodista Eduardo Cruz.
Cuando La Prensa quiso conversar con él, Arce no aceptó.
En la primera etapa del régimen sandinista coordinó la repartición de bienes confiscados a figuras de la dictadura somocista, conocida como la “piñata”.
“Arce no quiso hablar con la revista Domingo para este reportaje. Se le buscó por teléfono y también en la oficina que tiene a escasos metros de la Secretaría del FSLN que actualmente funciona como Casa Presidencial. Una asistente de él llamó a La Prensa y dijo: “Él (Arce) me pidió que le transmitiera que no está interesado que se publique ningún perfil de él y la verdad que mucho menos en el Diario La Prensa (risas). Agradece mucho la intención pero me pidió que le transmitiera el mensaje”, dice el diario.
INFORME ESPECIAL LaPrensa, Managua