La última encuesta CIEP-UCR le da apenas un 2% de respaldo en la carrera presidencial, pero Fabricio Alvarado, diputado, periodista y líder evangélico, candidato del partido Restauración Nacional no se echa para atrás.
Sabe que detrás de su movimiento se ha triplicado el caudal electoral para diputados en las últimas cinco elecciones. El sector evangélico pasó de un 2,7% en 1998 a 8,2% del resultado electoral legislativo en 2014, una cuota electoral nada despreciable que ya la deseara tener segura alguno de “los grandes” de la carrera hacia el cuatro de febrero.
En conversación con la periodista Vicky Luna, de la iniciativa Cívica Pro Costa Rica, Alvarado, no esquiva la acuciante emergencia del caos vial en el país y cree que la opción del tren eléctrico es digna de consideración bajo el modelo de la concesión, que otros satanizan.
Hombre de familia y de rígidos principios morales, Alvarado puntualiza que el caos vial “no se limita a la cantidad de accidentes de tránsito sino a la forma en que está afectando personal y familiarmente a los ciudadanos”, según le dijo a la periodista Luna.
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Por un ciudadano mejor informado
La serie de 11 entrevistas con los candidatos presidenciales la lanza la iniciativa cívica Pro Costa Rica en el marco de la presente campaña electoral. No entrevistaron a dos de los aspirantes.
Pro Costa Rica se identifica como “una iniciativa privada que busca promover una mejor comunicación ciudadana que permita entendernos para encontrar solución a problemas como infraestructura, empleo, salud, educación y seguridad”.
“El objetivo fundamental –dicen– es promover la participación ciudadana rescatando las buenas ideas para ponerlas en marcha, que todos seamos parte de la solución y no del problema”.
“Pro Costa Rica es un órgano apolítico y el objetivo es la participación activa de la ciudadanía en temas como Infraestructura, Presupuesto, Educación, Seguridad. Todo bajo el ala del Presupuesto Nacional”, agregan.
“Esta organización proporciona un espacio abierto, incluyente y seguro para abordar los asuntos delicados y problemas subyacentes a los que se enfrenta el país”, añaden.
