Edgar Fonseca, editor
La expresidenta Laura Chinchilla calificó al presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, como “una persona peligrosa, poco confiable”, en declaraciones que divulgó el diario La Prensa de Managua el sábado anterior.
“No me cabe la menor duda que Nicaragua está en manos de una personalidad de muy pocas convicciones democráticas, de muy bajos estándares éticos, sin ningún tipo de escrúpulos, dispuesto a manipular cualquier instrumento que tenga a su haber con tal de conseguir sus objetivos. Eso lo hace una persona peligrosa, poco confiable y desde el punto de vista de los intereses a largo plazo de Nicaragua, ciertamente no es lo que Nicaragua necesita” afirmó Chinchilla en una segunda publicación del diario en menos de una semana con la exgobernante tica.
En la primera parte, Chinchilla, quien gobernó 2010-2014, cuestionó duramente la fortuna del magistrado Roberto Rivas, presidente del Consejo Supremo Electoral de Nicaragua y aliado clave del mandatario en tres elecciones tachadas por la oposición de fraudulentas.
Rivas fue incluido por el Departamento del Tesoro de EE.UU. en una lista de 13 funcionarios extranjeros vinculados supuestamente a hechos de corrupción y violación de los derechos humanos. Analistas políticos en Managua ven inminente su salida del círculo de poder orteguista.
Chinchilla fustigó la magnitud del patrimonio del magistrado Rivas, quien cuenta con una mansión en el exclusivo condominio Villa Real, entre Escazú y Santa Ana, donde también reside la exmandataria.
Ortega me agredió…
Chinchilla denunció, en la segunda parte de la entrevista que sufrió departe de Ortega agresiones al territorio, al derecho internacional y “hasta personales”.
“Ustedes comprenderán que la visión que yo pueda tener sobre el gobierno de Daniel Ortega y el tipo de liderazgo que él representa es particularmente fuerte frente a lo que otros puedan pensar de él, por cuanto no es que solamente yo lo he visto operar, es que lo sufrí, sufrí sus agresiones, agresiones al territorio costarricense, agresiones al derecho internacional y agresiones hasta personales”, expresó.
Chinchilla se mostró pesimista del futuro democrático de Nicaragua bajo el régimen de Ortega. “El problema es que estamos a muchos años de las próximas elecciones en Nicaragua. Siento que los grupos de convicción democrática en Nicaragua deben procurar orientar los esfuerzos de la comunidad internacional, como la OEA, no solamente a exigir garantías para las próximas elecciones de 2021, sino la garantía de la democracia con mejores estándares”, añadió.
Las declaraciones de la exgobernante se dan a las puertas de un nuevo fallo –el próximo 2 de febrero– de la Corte Internacional de Justicia de La Haya sobre un reclamo de Costa Rica contra Nicaragua en defensa de su soberanía marítima.
En un anterior fallo en 2015, la Corte condenó al régimen de Ortega por la invasión de tropas nicaragüenses a a Isla Calero, territorio ratificado como costarricense por el máximo tribunal de justicia internacional.
Ver entrevista del diario La Prensa, Managua
