PuroPeriodismo.com, Edgar Fonseca, editor/Foto Oscar Sánchez, El Nuevo Diario, Managua
Al menos 15 muertos , unos 200 heridos y escenas de caos vivieron de nuevo este miércoles Managua y otros departamentos de Nicaragua en el agravamiento de la rebelión cívica que desde hace 43 días desafía al presidente Daniel Ortega quien se resiste a ceder el poder.
El Día de las Madres en Nicaragua quedó marcado ayer por la muerte y la sangre, tras un ataque armado que sufrieron miles de manifestantes que estaban en el sector de la UNI y la UCA, destacó El Nuevo Diario.
Masacre en marcha del Día de las Madres
Según El Nuevo Diario, fueron dieciséis las personas fallecidas durante los ataques de ayer en la marcha en honor a las madres de los caídos en las protestas de abril, que se realizó en diferentes departamentos del país.
El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenid), confirmó en un primer comunicado, que once personas fallecieron durante el ataque y 79 personas resultaron heridas. Por su parte, el Hospital Militar Escuela Dr. Alejandro Dávila Bolaños, informó que atendió un total de 11 personas que llegaron hasta este centro médico de la capital, dos de ellas, llegaron fallecidos y nueve heridos. El Nuevo Diario logró confirmar esta mañana tres personas más fallecidas en Chinandega.
Ocho de las 16 víctimas mortales fallecieron durante los ataques en Managua, tres en Chinandega, uno en Masaya y cuatro civiles más en enfrentamientos en Estelí.
Los nombres de los fallecidos confirmados por la Cenidh corresponden a:
Jorge Guerrero Rivas, asesinado frente a su madre en la calle cuando concluía la marcha cerca de la Universidad Centroamericana; Edgard Guevara Portobanco, de 38 años, y Francisco Reyes Zapata, de 33 años, murieron en el hospital Bautista; Michael González Hernández y Daniel García Reyes, mueren en el Hospital Vivian Pellas; y el adolescente Orlando Córdoba, de 15 años de edad, murió en el hospital Fernando Vélez Paíz.
La ola de violencia llevó a la cúpula de la iglesia a suspender su mediación en el diálogo entre gobierno y opositores y demandó que cese la represión.
El empresariado, aliado de Ortega durante los últimos 11 años, cerró filas y exige adelanto de elecciones.
Ortega les respondió que se queda.
Ortega dice que no se va
El diario La Prensa también repercutió la caótica jornada de ayer en la capital nicaragüense donde Ortega se negó a dejar el poder. Dijo que se quedará en Nicaragua.
Ortega dijo este miércoles que se queda en Nicaragua y que el país no es “una propiedad privada” durante una concentración de sus simpatizantes en Managua con la que respondió a la demanda de miles de ciudadanos que le exigen en las calles que abandone el poder y a la patronal que pidió adelantar elecciones y renovar el poder electoral.
“Nicaragua nos pertenece a todos y aquí nos quedamos todos”, sostuvo Ortega, quien aseguró que el odio y el demonio están sacando las uñas “cuando teníamos un país en paz”.
Mientras Ortega tomó la palabra, se reportó que había disparos contra una marcha pacífica en respaldo a las madres que perdieron a sus hijos desde el 18 de abril.
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Poderoso empresario ve acabado ciclo de Ortega
El poderoso empresario nicaragüense Carlos Pellas, aliado del presidente Daniel Ortega, demandó el adelanto de elecciones ante la grave crisis que atraviesa Nicaragua tras la rebelión cívica de abril con al menos 80 muertes, centenares de heridos, detenidos, disturbios, saqueos y bloqueos. “El modelo que traía el país se agotó”, sentenció en una amplia entrevista con el diario La Prensa.
El empresario más reconocido del país consideró que “el modelo que traía el país se agotó” y que ante la nueva realidad que vive Nicaragua “hay que encontrar una salida ordenada, dentro del marco constitucional que implique reformas que conlleven un adelanto de elecciones en Nicaragua, para una fecha acordada entre la Alianza Cívica por la Justicia y Democracia y el Gobierno, que permitan elegir por medio de un proceso libre y transparente a nuevas autoridades”, agrega La Prensa.
Como primero de muchos pasos, Pellas exigió “a lo inmediato, la renuncia de todos los miembros del Consejo Supremo Electoral”, consigna la entrevista.
Sin embargo, ante la demanda de un paro nacional para presionar la salida de Ortega, espera que esa “medida extrema” no se llegue a contemplar, pues dice que hay que hacer todo lo posible por que la respuesta llegue a través del diálogo, añade el medio.
