Edgar Fonseca, editor/Foto Twitter Fdedefutbol.com
Haber apostado a un fútbol avaro, pusilánime y medroso le costó caro a la Selección de Costa Rica en el Mundial Rusia 2018 de donde fue eliminada en la primera fase, muy lejos de la exitosa campaña de Brasil 2014 que la llevó a cuartos de final, destaca el escritor y pianista Jacques Sagot.
Incisivo crítico de temas deportivos, Sagot ratifica que a la Tricolor le faltó ambición e inspiración.
La Sele quedó clasificada en el puesto 29 de la competición solo por encima de Australia, por una tarjeta amarilla menos, Egipto y Panamá que se quedó con el farolillo rojo.
Costa Rica perdió 1-0 ante Serbia, también eliminada; cayó 2-0 ante Brasil y empató 2-2 ante Suiza en el mejor encuentro de su fase.
Algunos de los seleccionados defendieron la participación en Rusia pero el enojo de la afición no se hizo esperar.
“Dejamos una Copa Mundial con la cabeza en alto, sin arrepentirnos ni un segundo de nuestras decisiones y aprendiendo muchísimo para el futuro”, dijo el mediocampista Celso Borges tras cerrar el tormentoso paso por Brasil.
“Muchas emociones encontradas pero ante todo la satisfacción de cumplir un sueño, poder jugar un mundial y defender los colores de mi país. Lamentamos mucho no haberles podido dar más alegrías, pero sepan que siempre lo entregamos todo!”, agregó el defensor Bryan Oviedo.
“Nos vamos de Rusia 2018 con la cabeza en alto. Entregamos todo y sudamos la camiseta de nuestro país hasta el final. Gracias a todos por su soporte!”, afirmó el delantero Joel Campbell, quien fue titular hasta el juego final.
“Todo llega al que sabe esperar. Infinitas gracias a Dios por la oportunidad de jugar en un mundial y debutar con gol, un gol que grité con alma,vida y corazón , gracias a mi familia que siempre ha estado conmigo; a mi esposa ,mi hijo y todos los que nunca dudaron”, sostuvo Kendall Waston anotador del primer gol tico en Rusia frente a Suiza.
Pésimo, lamentable
“Jugamos una mediocre hexagonal. Jugamos una pésima ronda de partidos preparatorios. Jugamos un mal mundial. No hay nada más qué decir”, lamentó Sagot en una reciente columna en el diario La Nación.
Para Sagot se necesita de un vuelco radical de perspectiva para la siguiente eliminatoria.
¿Cómo calificaría el desempeño de la Selección Nacional de Costa Rica en el Mundial Rusia 2018?
-Pésimo, lamentable, vergonzoso. Nuestro segundo peor mundial, después del desastre de 2006. Gracias a una chiripa, a una carambola en el penal de Ruiz contra Suiza (mal ejecutado) conseguimos siquiera un puntillo. Un retroceso de décadas con respecto a lo que hicimos en Brasil 2014.
¿Tres razones clave para entender el desempeño de dicha selección?
-Óscar Ramírez, Óscar Ramírez y Óscar Ramírez. Helas ahí. Su fútbol pusilánime, profiláctico, amarretes, avaro, medroso, carente de vuelo, de ambición, de inspiración.
¿Tres recomendaciones que haría para variar y mejorar dicho desempeño en procesos venideros en razón de los resultados obtenidos en Rusia 2018?
-Contratar a un entrenador que sea una verdadera águila. Fomentar fogueos con equipos realmente grandes, esos que nos desnudan y nos exponen, y salirnos del mediocrísimo circuito de la Concacaf. Enrolar los servicios de un ejército de avezados psicólogos deportivos que nos ayuden a creer en nosotros mismos, a desarrollar el músculo de la voluntad y a lidiar con situaciones de alta presión.
Como siempre y desde siempre, nada de lo que se “recomienda” llega al plano de los hechos. Seguiremos en la misma modorra, la misma letanía de “feliz” mediocridad. Venden más el chusmero mediocre que los resultados. ¿Remember la renuncia de Pinto y sus “derivaciones”? Sería realmente saludable que este “fútbol” no clasifique a Qatar 2022, para ponerle punto final a esta farsa, y “sigamos aprendiendo” porque el vocablo “evolución” es desconocido en este potero .