Edgar Fonseca, editor/Foto ABC News
Un guarda nicaragüense de apellido Espinoza, de 32 años, sospechoso de asesinar a Carla Lucía Stefaniak, de 36 años, una turista venezolana que desapareció la semana anterior de un hospedaje en San Antonio de Escazú, tuvo acceso a su habitación, confirmó ayer la Fiscalía.
Las autoridades presumen que le dio muerte con una arma punzo cortante y un cable.
A las 8:06 a.m. de este miércoles, el OIJ confirmó, vía WhatsApp, que por huellas dactilares se verificó la identidad de la fallecida como Stefaniak.
A sus familiares se les permitió ver el cuerpo casi a medianoche del martes.
Contra el sospechoso, quien residía en un apartamento en el mismo hotel, al lado del de la víctima, y está en condición migratoria irregular en el país, se fijaron tres meses de prisión preventiva, informó el Ministerio Público.
La medida cautelar solicitada fue acogida por el Juzgado Penal de la zona esta tarde, la cual quedó en firme, debido a que no hubo apelación por la parte defensora.
Tuvo acceso al cuarto
Según la Fiscalía, los hechos que se investigan ocurrieron entre la noche del 27 y madrugada del 28 de noviembre anterior, en un hotel de Escazú. Al parecer, Espinoza aprovechó tener acceso a la habitaciones, ya que laboraba como guarda de seguridad del lugar, para ingresar al cuarto de la ofendida.
Se presume que, con un arma punzocortante y un cable, el imputado acabó con la vida de la extranjera y semienterró el cuerpo.
Tras el hallazgo del cuerpo de Stefaniak, la tarde del lunes, la Fiscalía dirigió un operativo en su habitación, donde, con ayuda de la Unidad Canina y pruebas con luminol, se ubicaron rastros de sangre.
Espinoza fue detenido ayer y figura como principal sospechoso del crimen. El caso continúa en investigación, informó el ente acusador.
El papá esperaba un milagro
“Tengo toda la fe del mundo que ese cuerpo hallado ayer no es el de mi hija”.
Así reaccionó la mañana del martes ante los medios el venezolano Carlos Caicedo, padre de Carla Stefaniak.
El hallazgo del cuerpo de una mujer la tarde del lunes a 80 metros de las instalaciones del hospedaje hizo temer a las autoridades que se tratara de la joven desaparecida.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) confirmó la identidad de la persona hallada hasta este miércoles.
El padre llegó en compañía de otro pariente a las instalaciones del complejo forense en San Joaquín de Flores.
Caicedo insistia en que no estimaba que fuese su hija la persona encontrada.
Creía, más bien, que alguien la podría tener en cautiverio.
“Estoy aquí en los servicios forenses porque quiero despejar la duda de que no es ella. Señores que la tienen en cautiverio, por favor, devuélvannosla”, clamó Caiceco vehemente.
“Señores que la tienen, porque estoy seguro que la tienen”, reiteró.
A pesar del duro momento e incertidumbre que atraviesa, Caicedo guardó palabras de amistad para el país.
“Imagino y sigo imaginando el concepto que he manejado acerca de este país, la Suiza de América”, afirmó.
Dijo que son una familia de clase media, asalariada.
“El hecho de que vivamos en Estados Unidos no significa que tengamos riquezas”, agregó.
“Hago un llamado a las autoridades de este país, a que se siga manejando el concepto de que es un país seguro”, puntualizó.
Les permitieron ver el cuerpo
Alrededor de las 11:30PM, 5 de diciembre, finalmente permitieron a la familia de Carla ver el cuerpo. El papá de Carla confirmó que el cuerpo pertenece a ella. Es ahora oficial, consignó el sitio Facebook Finding Carla.
No hay palabras para expresar cuán devastados están su familia y sus amistades. Queremos que el mundo sepa que nunca olvidaremos a Carla. Nunca olvidaremos la alegría que trajo a nuestras vidas, y cuanto nos hizo reir. Siempre estaremos con ella y sabemos que siempre ella estará con nosotros. Que Dios bendiga su alma, agregó dicho sitio.
Vamos a dejar esto así? No lo haremos. En los próximos días, publicaremos pistas digitales que han sido críticas para la investigación. Se continuarán las preguntas sobre la implicación de otros en el asesinato de Carla. Nosotros nos aseguraremos de que este caso no sea olvidado como muchos otros en Costa Rica, mencionaron.
Pero por ahora sepan que Carla y su familia están agradecidos por todo el apoyo que le han brindado. Por favor, únanse en nuestros rezos por Carla y por su familia, añadieron.
Misteriosa desaparición
Su hija llegó una semana atrás para celebrar su cumpleaños junto a una cuñada.
Desapareció en las horas previas a la salida de su vuelo de regreso hacia Tampa.
La noche anterior a su desaparición, Stefaniak comunicó vía WhatsApp que llovía fuerte en el sitio y que la electricidad salió de servicio.
“La ultima vez que supe de mi hija fue como el 25 de noviembre, me paso videos, chateamos y hablamos bastante”, detalló Caicedo.
“Estaba disfrutando y pasándola bien”, agregó.
Junto a su cuñada, Stefaniak visitó entre otros sitios playa Manuel Antonio y La Fortuna.
Luego regresó al hospedaje que consiguió por la aplicación Airbnb.
No le respondió
Según Caicedo, su hija cumplió años el 28 de noviembre.
Ese día él le envió un WhatsApp pero ella no le respondió.
“El día de su cumpleaños, le escribí para felicitarle. Le dije: ‘hola hija, ¿cómo estás?’ “, aseveró.
“En esos mensajes, solo me apareció un check. No fue recibido ningún mensaje”, manifestó.
“Señores que la tienen en cautiverio, por favor, devuélvannosla”, enfatizó.
