Edgar Fonseca, editor/Foto Helios de la Rubia, ReaMadrid.com
Un paradón de nuestra estrella europea, Keylor Navas, fue suficiente para que el Bernabéu estallara y lo ovacionara, este sábado, en el regreso como titular al Real Madrid con triunfo convincente, 2-0, ante el Celta.
Keylor fue parte de la ilusión del regreso del Madrid con Zinedine Zidane de nuevo al mando.
Tras el partido, Keylor habló en zona mixta sobre sus sensaciones que “fueron muy buenas”, detalla el sitio MundoDeportivo.com de Barcelona.
“Siempre he trabajado para ser titular. Nunca me he dado por vencido y siempre he tenido fe de que podía jugar. El míster hoy lo ha decidido así y yo estaba preparado”, sostuvo el estelar arquero nacional.
“Doy gracias a Dios y a mi familia cada vez que juego y me salen las cosas bien porque son los que me apoyan cuando vienen los momentos complicados”, agregó.
Para Zidane –dice el diario Marca de Madrid– no hay debate: Keylor Navas es su portero. Su relación va más allá del hecho de que, con el costarricense bajo los palos, el técnico haya conquistado tres Champions con el Madrid. Keylor es un tótem para Zidane. Un portero por el que no le importa mantener una línea contraria a la corriente de opinión imperante en el club. Y no es la primera vez.
Volvió Zidane al banquillo y regresó Keylor bajo los palos de la portería madridista. Algo que, en la Liga, no sucedía desde la segunda jornada del Campeonato (1-4 al Girona en Montilivi). En la siguiente, Julen Lopetegui ya otorgó la titularidad a Thibaut Courtois. A Zidane, por entonces de retiro sábatico, no debió de hacerle gracia. El tico era su hombre bajo palos. La confianza era total y absoluta, agrega el más famoso diario deportivo de España.
“El regreso de Zidane devolvió la titularidad al guardameta internacional costarricense, que premió a su nuevo técnico con un paradón a mano cambiada a cabezazo de Maxi Gómez antes del descanso que bien valió su confianza”, afirmó el sitio sport.es de Barcelona.
Como un huracán
El estímulo que supuso la noticia del regreso de Zidane el pasado lunes se trasladó al terreno de juego, destac´el sitio oficial del club merengue.
El Real Madrid logró la victoria ante el Celta por 2-0 en un partido en el que fue muy superior y tuvo ocasiones para haber ganado por una renta mayor. Los goles de Isco y Bale sellaron los tres puntos en el estreno de la segunda etapa en el banquillo del entrenador de las tres últimas Champions. Un encuentro en el que, además, Sergio Ramos alcanzó las 600 titularidades en el equipo.
El Madrid –agrega el sitio– salió desde el primer minuto decidido a por el partido. En el 5’, Ramos tuvo la primera oportunidad tras un córner. Los blancos tenían el balón y jugaban cerca del área rival. El peligro llegaba por la izquierda, con la conexión entre Bale y Marcelo. Pero el Celta, poco a poco, fue reponiéndose al buen inicio local y en el 16’ Maxi Gómez obligó a una gran parada de Keylor Navas. Esa ocasión espoleó a los gallegos, que durante unos minutos disputaron la posesión a los de Zidane.