La energía había sido restituida parcialmente en varias zonas de Caracas y Miranda por un lapso de seis horas y 30 minutos.
Comerciantes especulan con el hambree de la gente
La necesidad de comprar alimentos, agua potable y otras provisiones –añade dicho medio– ha dejado en evidencia dos realidades: la de los venezolanos que están dispuestos a pagar sus comprar en divisas, y la de los comerciantes que abren sus locales y ante la imposibilidad de usar la banca, reciben moneda extranjera, que manejan a un tipo de cambio inferior al promedio en el que se cotiza.
Los establecimientos que abren sus puertas tienen gran cantidad de usuarios, que pueden pasar varias haciendo cola para comprar sus insumos.
Los ciudadanos aplican otro método para abastecerse de agua en la avenida Boyacá, mejor conocida como Cota Mil. Las personas llenan envases y botellones en las tomas de agua que hay en el lugar a la altura de La Castellana, mientras que a la altura de Sebucán los camiones cisternas se abastecen de agua, agrega el diario.