Edgar Fonseca, editor/Foto Dallas Morning News
La administración del presidente Trump no ha pedido incluir a Costa Rica dentro de nuevos pactos migratorios con naciones de la región que pretenden frenar el flujo de migrantes hacia EE.UU., informo la Cancillería en San José.
Así se lo hizo saber la embajadora Sharon Day a la Ministra de Relaciones Exteriores a.i., Lorena Aguilar Revelo durante una cita en la Casa Amarilla.
NI la embajadora Day ni la embajada de EE.UU. en San José han hecho mención a esa cita celebrada el lunes.
Bajo amenaza de sanciones con aranceles a sus exportaciones, Guatemala firmó semanas atrás un pacto de estos, denominado de tercer país seguro, donde los migrantes se ven obligados a pedir refugio en dicha nación antes de avanzar hacia EE.UU.
El pacto es cuestionado fuertemente por sectores políticos guatemaltecos.
A Costa Rica no se lo han pedido
Aunque un portavoz de seguridad estadounidense aseguró que avanzarían con la firma de pactos similares con otras naciones del istmo, entre ellas, Costa Rica, la embajadora Sharon Day visitó la Cancillería e informó que no han hecho tal gestión, ratificó Relaciones Exteriores.
Así lo confirmó la Canciller a.i. Aguilar Revelo.
Luego de mantener una reunión con la Embajadora de los Estados Unidos de América, Sharon Day, para dialogar sobre las informaciones publicadas recientemente y con relación al examen de solicitudes de protección con los países centroamericanos del triángulo norte, la representante diplomática aclaró que su Gobierno no ha solicitado unir a Costa Rica en estos acuerdos, destacó la Cancillería.
Según Relaciones Exteriores, la embajadora Day congratuló al Gobierno de Costa Rica por todos los esfuerzos que lleva a cabo en el abordaje de la situación con relación al flujo migratorio y destacó los resultados positivos de la intensa cooperación bilateral en materia de seguridad y su deseo de fortalecerla.
La Canciller a.í. Aguilar Revelo agradeció el apoyo del Gobierno de los Estados Unidos y se congratuló por el positivo avance de los proyectos de cooperación entre ambos países, añadió la versión oficial.
El primero de agosto, la agencia AFP informó que el secretario interino de Seguridad Nacional estadounidense, Kevin McAleenan, de visita en Guatemala para dar seguimiento al pacto, dijo a periodistas que con más convenios similares se detendría la trata de personas y la migración irregular hacia su país.
“Ahora estamos tratando de conversar con Honduras y El Salvador para tener arreglos similares a los de Guatemala. El presidente (estadounidense Donald) Trump también invitó a Costa Rica y Panamá porque esto lo vemos como una responsabilidad regional“, declaró McAleenan por medio de un traductor en un encuentro con la prensa, según la versión de la agencia.
Cuestionamiento en Guatemala
“El plan, por el cual Donald Trump amenazó a Guatemala dos días antes de la firma, para después decir que era un país amigo, se encuentra en vilo, por varias razones: el secretismo con el cual lo manejó el Gobierno que va en ruta de salida y además las ventajas que se han pretendido vender hasta ahora son relativas y ambiguas, pero sobre todo no benefician un ápice a los millones de guatemaltecos que viven en EE. UU., a pesar de que son ellos quienes sostienen la estabilidad macroeconómica, a través de la creciente cifra de millardos de quetzales que envían cada año y que en una década se podrían triplicar”, destacó este miércoles el diario Prensa Libre de Ciudad Guatemala.
“El propio gobierno estadounidense reconoce la vía legislativa que debe pasar el acuerdo, algo que el Ejecutivo busca evitar bajo pretextos legalistas que podrían rayar con el fraude de ley y que no hacen sino atrasar el verdadero acuerdo, dialogado y asertivo para detener el éxodo que se disparó a causa de la mala gestión moralista”, agregó el diario.