Edgar Fonseca, editor
La atropellada renuncia de la ministra de Hacienda, Rocío Aguilar, tras un informe de la Contraloría General de la República que recomendó suspenderla un mes por su supuesta responsabilidad en el denominado “hueco fiscal”multimillonario que dejó la primera administración PAC, generó fuertes críticas entre analistas y observadores.
La renuncia de la funcionaria, considerada una pieza fundamental de la administración en el plan de ajuste fiscal se dio, además, horas después de un acuerdo del presidente Alvarado y rectores de las universidades públicas la noche del martes que dejó sin efecto un acuerdo previo con Hacienda para redirigir ¢35 mil millones del FEES a obras de infraestructura.
En conferencia de prensa, Aguilar rechazó que esto último incidiera en su salida.
El “hueco fiscal”, por el que la Contraloría pide se le sancione se refiere a un faltante de ¢600 mil millones que la administración Solís dejó sin presupuestar para el año 2018.
“Quizá para algunos era la ministra de los números, una ministra fría, pero lo único que quería era un mejor futuro para este país”, afirmó.
Ratificó que siempre contó con el respaldo en su gestión del presidente Alvarado.
“Siempre tuve el respaldo que para mi trabajo se requería”, insistió.
“Hasta el día de hoy –agregó– siempre tuve el respaldo del señor presidente”.
Aguilar puntualizó que guió su misión con compromiso y pasión.
Y se mostró benigna con sus detractores.
“Para las personas que me han atacado, no he sentido ningún ataque”, dijo.
“Lo más importante es que he servido al país”, expresó.
Alvarado no comparte decisión de Contraloría
El mandatario, al aceptar la renuncia de Alvarado dijo que no compartía la recomendación de la Contraloría.
“No comparto la resolución de la Contraloría, doña Rocío siempre ha actuado para proteger el interés superior del país”, dijo Alvarado.
“Respeto la decisión de ella, que entiendo también como un acto en resguardo de su honra, su imagen y su señorío”, agregó.
“Ella ha servido con distinción al país. Su arduo trabajo fue clave para estabilizar y sanear las finanzas públicas”, enfatizó el gobernante.
“Desde el primer día, este gobierno procuró y siempre procurará la salud de las finanzas públicas. Resolvimos un problema”, destacó Alvarado.
“Mi mayor agradecimiento será mantener la ruta responsable en materia de la hacienda pública”, prometió en medio de una oleada de reacciones de crítica y preocupación por el vacío que deja Aguilar.
Los líderes de las principales fracciones guardaron silencio tras el anuncio de la salida de Aguilar.
“Mi profundo agradecimiento ciudadano a doña Rocío Aguilar, por su impulso al saneamiento de nuestras críticas finanzas públicas, por su capacidad, valentía, entereza y calidez. ¡Una extraordinaria funcionaria y persona! Todos perdemos con su renuncia” afirmó el periodista y exdiplomático, Eduardo Ulibarri.
Hay gente que celebra
“Hoy celebran el PAC y sus aliados históricos”, lamentó el analista Juan Carlos Hidalgo quien recientemente anunció que se incorporará de lleno a la próxima campaña electoral del PUSC.
“Tras meses de zafadas de piso y desautorizaciones por parte de colegas del gobierno y otros elementos del oficialismo –y sin un presidente que la defendiera– renuncia la ministra que más credibilidad le daba a esta administración”, añadió Hidalgo.
La observadora Abril Gordienko calificó como “pérdida grave” la renuncia de Aguilar.
“Rocío Aguilar es una campeona. Una funcionaria responsable, íntegra y valiente. Una especie en extinción en la Administración Pública. Es una pérdida grave”, afirmó.
“Encontrar un reemplazo con sus características será muy difícil… Y fundamental para la estabilidad financiera del país”, aseveró.
¿Por qué no la impugnaron?
El exministro y exdiputado, Francisco Chacón, exjefe campaña PLN, dudó de las razones de la salida de Aguilar.
“Me cuesta creer que la razón de la salida de doña Rocío sea la resolución de la Contraloría, una decisión que bien podía impugnarse y caerse por las deficiencias que pueda tener”, aseguró.
“Llámenlo cómo quieran y disimúlenlo como les plazca, pero la regla fiscal dejó de existir hoy. Estuvo vigente poco tiempo, pero los impuestos sí son permanentes”, lamentó Chacón.
“Probablemente Rocío Aguilar ha sido la funcionaria técnica, que mejor operadora política resultó, en la presente administración”, reaccionó el analista Gustavo Araya.
“Con un cálculo que le permitió anticiparse y evitar que una eventual sanción diera al traste con el trabajo que desde su cartera se llevó a cabo”, añadió.
El exministro de Comunicación, Roberto Gallardo, administración Chinchilla Miranda, calificó de increíble el desenlace de la salida de dicha jerarca.
“Increíble que la irresponsabilidad suprema de dejar un hueco fiscal de 600,000 millones termine en la renuncia de Rocío Aguilar, pero que no haya ninguna consecuencia para Luis Guillermo Solís”, agregó.
“El balance de ideología política en el gobierno pende de un hilo llamado André Garnier, si también se va el Sr. Garnier, nadie sensato quedaría que le hable al oído al Presidente en el rumbo que debería tener el gobierno e inevitablemente la balanza se irá a la izquierda. Muy triste”, sostuvo en las redes el usuario Eduardo Berrocal.
