Edgar Fonseca, editor
El abrupto relevo del histórico exgoleador morado, Evaristo Coronado, de la gerencia deportiva de la S, al calor de dos goleadas consecutivas, manda una clarísima señal de los dueños del club a toda su estructura, a su cuerpo técnico, a sus jugadores, sean leyendas, “estrellas” o novatos: ahí nadie es inamovible.
Para su entrenador, otro histórico, el mensaje no puede ser más claro: “tenga listas las maletas”.
Su continuidad dependerá de los resultados, entiéndase de la lista de campeonatos alcanzados o fallidos.
El inesperado relevo de Coronado, el arribo de otro histórico como gerente deportivo, y el tibio respaldo al técnico, ocurren al calor de los acontecimientos, pese a que su jerarca asegura que actúan con mente fría.
Ayuna la afición de los entresijos de estas decisiones, de qué razones de fondo mediaron para darle las súbitas gracias a Coronado, de qué extremos abarcaron las conversaciones de las últimas horas para que el entrenador se viese necesitado de un respaldo, no sin antes confesar que de “los errores se aprende”, ponen en la mira pública, como ha ocurrido con el errático andar de Alajuelense en las recientes temporadas, la conducción, el desempeño y el devenir del otro gran club futbolístico nacional.
Lo sucedido en las últimas horas reedita capítulos por los que han transitado los manudos hasta alcanzar, ya, 10 largas temporadas de sequía de títulos.
Hay quienes creen que Paté no estaba listo para asumir la conducción de un club de la exigencia del Monstruo.
Interpretan que su designación fue precipitada.
Igual en su momento, la Liga le apostó a sus históricos: Wilmer, Montero, Miso, y el mismísimo Arnáez, en doble episodio, y pronto descubrieron que, por más amor y buena voluntad con la camiseta y la institución, no daban la talla.
Uno tras otro fue relevado en circunstancias más o menos escabrosas, con el sedimento del vacío de campeonatos.
Caso aparte los logros históricos del Machillo Ramírez con una estructura consolidada.
Hoy Saprissa se debate en sostener a una de sus leyendas desafiado por resultados adversos, locales y externos, o apostar a un giro radical de rumbo.
Su presidente advierte que no actúan bajo el fuego de las circunstancias pero la realidad del negocio futbolero es cruda, aquí o allá. Está a expensas de resultados.
Que lo digan las sísmicas experiencias por las que ha pasado nuestro astro europeo en los últimos meses.
Punto final-Salvo un acontecimiento excepcional, Alajuelense, Saprissa, Herediano y San Carlos disputarán la cuadrangular final.
Si de lógica se tratara, los erizos tienen todo a su favor para alzar su ansiada copa 30.
Pero en fútbol, la lógica no vale.
Hay que esperar al minuto final o a la prórroga para estar seguros de un resultado.
Y en el caso de Saprissa, a pesar de los buenos deseos públicos de su jerarca, la continuidad del técnico tendría sus horas contadas si no logran su objetivo. A menos que quieran hacerse los desentendidos con una afición exigente e implacable.
Lo bueno, lo malo y lo feo
Lo bueno-Al igual que San Carlos en el torneo anterior, en este certamen la gran sorpresa la dio Jicaral y la gran duda que salta es, ¿dónde están esos visores federativos buscando talentos, “hasta por debajo de las piedras”, en zonas como Jicaral, Guanacaste, Pococí o Talamanca? Luego nos sorprendemos que los entrenadores se aburren…
Lo malo-Limón corre peligro de descender y de desaparecer en manos extrañas.
Lo feo-El arbitraje, y en la Fedefutbol no están enterados.