Edgar Fonseca, editor/Foto: Nayira Valenzuela, Confidencial, Managua
El independiente Observatorio Ciudadano COVID-19 elevó a 1749 muertos y a 6775 los casos sospechosos de coronavirus en Nicaragua, donde el Gobierno solo admite 74 fallecidos y 2170 casos positivos desde que la pandemia ingresó oficialmente al país el pasado 18 de marzo, destaca el sitio Confidencial de Managua.
El Observatorio Ciudadano COVID-19, que trabaja con una red de médicos y voluntarios de toda Nicaragua, ha verificado 1878 fallecidos, de las cuales 129 se categorizan como muertes por neumonía y 1749 como muertes sospechosas por coronavirus, cita un informe de la agencia noticiosa EFE divulgado por dicho sitio.
Managua es epicentro de contagios y muertes
Según Confidencial, Managua, con 722 muertos, es el departamento de Nicaragua con el mayor número de fallecidos, seguido de Masaya (224), León (140) y Matagalpa (118), todos en el Pacífico, de acuerdo con el informe cortado hasta el 24 de junio.
Según el Observatorio, que localiza de forma independiente casos de la covid-19, la cantidad de personas contagiadas con el coronavirus SARS-coV-2 aumentó de 6081 a 6775, es decir 694 nuevos casos en la última semana, lo que representa un 11% de incremento en el período.
Managua, con 2918 casos sospechosos, es el departamento con mayor incidencia de esa enfermedad, seguido de Matagalpa (687), Masaya (552), León (399), Estelí (325), Chinandega (272), Jinotega (208), Madriz (184) y Granada (180), según el informe del mencionado sitio.
De acuerdo con loa versión de la agencia EFE, el Observatorio informó que hasta el miércoles pasado recibió reportes de 652 trabajadores de Salud con sintomatología asociada o presuntiva de la covid-19 —casi un 10 % del total—, entre ellos 78 que perdieron la vida.Entre el personal sanitario que habría fallecido por coronavirus hay 34 médicos, 21 personal de enfermería, 11 personal administrativo, tres visitadores médicos, dos laboratoristas y siete categorizados como “otros”.Por otro lado, el Observatorio reportó 70 irregularidades en la semana, referidas principalmente a exposición de personas en actividades o aglomeraciones, a respuestas inadecuadas de las autoridades de Salud, y a amenazas y represalias.