Edgar Fonseca, editor/Foto Confidencial, Managua
En Nicaragua, durante el primer semestre de 2020, en medio de la pandemia, se ha registrado un aumento de crímenes, que son relacionados, entre otros factores, con la liberación de reos comunes, que han incluido presos por crímenes de alta peligrosidad, femicidas y agresores de mujeres, destaca el sitio Confidencial de Managua.
Al menos 129 asesinatos han sido cometidos, sobre todo en zonas rurales, denunció una investigadora independiente.
Entre enero y julio de 2020, el presidente Daniel Ortega otorgó beneficio de convivencia familiar a 7.120 reos y reas de todos los centros penales del país, y que algunos expertos, como Elvira Cuadra, quien se especializa en temas de seguridad, creen que muchos de estos criminales podrían estar reincidiendo, agrega el sitio.
Ante la ola de criminalidad, Ortega dijo en un evento de celebración del ejército, que tanto la Policía como el Ejército se estarán encargando de velar por la seguridad de los nicaragüenses para “enfrentar una pandemia como esta con inseguridad, con inestabilidad con crímenes por decenas, por centenas”, admitió.
Sin mascarillas en público
Daniel Ortega y Rosario Murillo fueron los únicos que no usaron mascarillas para protegerse de la covid-19 durante el acto por la celebración del 41 aniversario de fundación del Ejército de Nicaragua, celebrado el miércoles 2 de setiembre en el que advirtió que “aquí (Nicaragua), no podemos decir ya, ya se acabó la epidemia, no podemos confiarnos”, añade Confidencial
Las declaraciones del mandatario contrastan con la forma en que su Gobierno empezó manejando la pandemia de covid-19 en Nicaragua, que pasó por una etapa de negación y posteriormente se minimizó el impacto que esta podía tener en las personas cuando se le comparaba con “una simple gripe”.
Sin plata para vacunas
Ortega además mencionó que Nicaragua no aspira a encargar vacunas en los laboratorios que actualmente se encuentran desarrollándola porque asegura que el país no tiene recursos, cita dicho medio.
“Los países que no tenemos esos niveles de recursos ni se nos ocurre ir a buscar que nos aparten unas cuantas vacunas, porque ahí hay que poner una garantía, hay que poner dinero”, expresó el dirigente sandinista.
Sin embargo –enfatiza Confidencial– Ortega no hizo mención a la posibilidad de producir la vacuna contra la covid-19 Sputnik V, en el laboratorio Méchnikov en Nicaragua, y que, según dijo a medios oficiales Stanislav Uiba, gerente general del Instituto Latinoamericano de Biotecnología Méchnikov, podría empezar a producirse a finales de este año en el país. Ortega más bien alentó a las personas a tomar las medidas preventivas que, según él, brindan los médicos y el sistema de salud. Sin embargo, su gobierno continúa llamando a actividades masivas en la que participan niños y adultos sin tomar las medidas preventivas correspondientes.
Crece la ola de criminalidad/129 asesinatos en zonas rurales
La investigadora Elvira Cuadra también alertó que el papel que está jugando la Policía también ha afectado a la seguridad ciudadana, que ya percibe más violencia delincuencial todos los días en las calles e incluso en sus hogares y negocios, cita Confidencial.
Cuadra reseñó que en el primer semestre de 2020 se registraron 129 asesinatos principalmente en zonas rurales, un promedio de diecinueve asesinatos por mes que concuerda con el mismo período en 2019.
En el primer semestre de 2020 se registraron 129 asesinatos, un promedio de diecinueve asesinatos por mes, según datos preliminares revelados por Cuadra, de un informe dado a conocer en julio.
Algunos de los lugares más afectados en 2020 por este tipo de asesinatos son Jinotega, San José de Bocay, Matagalpa, Caribe Norte y ahora, a diferencia de 2019, también a Managua.
“La Policía está funcionando más como un aparato para mantener la política de represión del Gobierno y no está cumpliendo con sus funciones afecta la seguridad, también el hecho de la existencia y operatividad con impunidad de los grupos paramilitares que existen en diferentes lugares del país”, denunció Cuadra en el programa Esta Noche del sitio Confidencial.
Aseguró que la frase de que “Nicaragua es el país más seguro de Centroamérica” se ha vuelto un cliché y, contrario a esto, hay un “incremento de la delincuencia y la criminalidad en general en el país, sobretodo desde 2018”.
“La presencia de armas de fuego que fueron distribuidas por el Gobierno y que están en las manos de estos grupos paramilitares son un factor que la misma Policía revela con un incremento de la presencia de armas de fuego en los delitos en general y sobretodo en los delitos más peligrosos… Otro elemento que tiene que ver con la liberación de personas detenidas por delitos comunes, ya que una parte de ellos está cometiendo nuevamente delitos y eso se agrega como un factor de riesgo”, detalló, en una entrevista con el programa Esta Noche del sitio Confidencial.
La investigadora recordó además que otro de los factores que alimentan la seguridad ciudadana son los discursos de odio, estigmatización y criminalización que el régimen de Ortega ha mantenido en los últimos tres años de crisis sociopolítica.
La experta asegura que la percepción de inseguridad no solo se vive en la ciudadano, sino en el campo.