Edgar Fonseca, editor/Foto CBS News
Las autoridades en los Estados Unidos han reportado más de 11 millones de casos de coronavirus hasta el domingo, a medida que los brotes en el país se aceleran a agonizantes nuevos niveles de hospitalizaciones, destaca The New York Times este domingo 15 de noviembre.
El recuento superó los 10 millones hace apenas una semana, y más de 1 de cada 400 estadounidenses han dado positivo desde entonces.
El país registró más de 159.100 nuevos casos el sábado, el tercer total más alto de la pandemia, elevando el nuevo promedio de siete días a más de 145.000, con tendencias al alza en 48 estados y un aumento del 80 por ciento en los casos adicionales desde el promedio de dos semanas, añade el Times.
- El reporte del Johns Hopkins University & Medicine de las 12:26 mediodía de este domingo mantenía en 10.962.835 los contagios en EE.UU. y en 245.933 las muertes, comprobó PuroPeriodismo.
Diez estados establecen registros de casos de un solo día; 29 estados agregaron más casos en la última semana que en cualquier otro período de siete días. El domingo, los funcionarios de Nueva Jersey anunciaron 4.538 nuevos casos, el segundo récord de un día consecutivo.
Mayor contagio entre negros e hispanos
La pandemia continúa cobrando un precio desproporcionado en los estadounidenses de color, que han sido hospitalizados a tasas aproximadamente cuatro veces más altas que las de los blancos no hispanos desde el inicio de la epidemia, enfatiza el diario neoyorquino.
Las personas hispanas o latinas han sido hospitalizadas con la tasa más alta, 4.2 veces la tasa de blancos, con indios americanos no hispanos o nativos de Alaska hospitalizados a 4.1 veces la tasa de blancos y negros a 3.9 veces la tasa de blancos, según las cifras de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Las cifras se tabularon durante la semana que finalizó el 7 de noviembre. Las tasas de hospitalización más altas se han relacionado con tasas de infección más altas, ya que es más probable que los estadounidenses no blancos sean trabajadores esenciales con trabajos en la industria de servicios de alimentos o atención médica domiciliaria, que no se pueden llevar a cabo de forma remota y requieren interactuar con el público. Estos trabajos a menudo no ofrecen seguro médico ni tiempo libre remunerado, beneficios que permiten a los trabajadores quedarse en casa cuando están enfermos, según el Times.
Ver: The New York Times