Edgar Fonseca, editor
El juzgado penal de Quepos confirmó este jueves la medida de arresto domiciliario contra un individuo de apellido Bodaan investigado por la
Fiscalía en relación con el asesinato de la anestesióloga María Luisa Cedeño, de 43 años, perpetrado –según las autoridades– entre el 19 y el
20 de julio en una habitación del hotel La Mansión Inn, Manuel Antonio, informó el abogado Alfonso Ruiz Ugalde representante de la familia
de la víctima.
Según dicho abogado, el juez penal Daniel Rodríguez Castro, mantuvo las medidas adicionales para dicho acusado, identificado por las
autoridades como propietario del inmueble donde ocurrió el suceso.
Se mantiene:
-impedimento de salida del país
-retención del pasaporte
-prohibición de acercarse a testigos del caso
Las medidas serán revisadas el 13 de febrero al cumplirse seis meses de dictadas, confirmó el abogado Ruiz.
Las restricciones fueron dictadas el 14 de agosto.
Bodaan no debe salir del inmueble. Además, está monitoreado por un brazalete electrónico, añadió Ruiz.
Otros dos detenidos en el caso, un bailarín nicaragüense de apellido Herrera y un ingeniero de sistemas, costarricense de apellido Miranda,
permanecen presos, investigados por la Fiscalía, por dicho asesinato.
El abogado Ruiz dijo que el detenido Herrera desistió de revisión de su estado de detención.
Las pruebas en su caso “son contundentes”, aseveró Ruiz.
Del sospechoso Miranda está pendiente una audiencia en el juzgado de Quepos.
Concentrados en pruebas penales penales
El abogado no descartó plantear un reclamo civil resarcitoria por lo acontecido contra la anestesióloja jefe del hospital CIMA.
Sin embargo, aclaró que de momento están concentrados en fortalecer las pruebas penales.
El caso
Cedeño llegó sola a dicho hotel el sábado 18 de julio y –según distintas versiones– fue vista, por última vez, el domingo 19 de noche cuando
pidió una botella de vino en la recepción y se retiró a su habitación.
Jose Miguel Villalobos , defensor de Bodaan, rechaza esa versión.
Del momento en que la víctima al parecer estuvo en el lobby no se supo más de ella hasta que se descubrió el crimen.
Fue hallada con severas lesiones envuelta en sabanas.
Tras las diligencias del OIJ en el sitio, los agentes arrestaron en el sitio al individuo de apellido Herrera, de 38 años, quien, al parecer, tenía
un año de estar alojado allí por alegada amistad con el dueño del inmueble.
Se le identificó como un bailarín de night club en San Pedro de Montes de Oca quien, por razones desconocidas, se movilizó hasta el hotel de
Manuel Antonio donde permaneció hasta el suceso.
La ONG Provida Costa Rica denunció en un post Facebook la permanencia de dicho individuo en el hotel.
El post incluye un video de 46 segundos en que se observa al sospechoso relajado manipulando utensilios en una cocina del hotel.
El individuo aparece en primer plano, con su cabeza rapada y barbudo.
Segunda captura
Las autoridades detectaron relación entre el bailarín y el segundo sospechoso detenido en Jacó una semana más tarde.
En una foto de la acción ejecutada en un condominio de Jacó se observó al segundo sospechoso de espaldas, con tapabocas sanitario, en
camiseta verde y pantaloneta a rayas blancas y verde marino al lado. Aparece en chancletas y esposado desde los pies.
A su lado lo custodiaba un agente del OIJ.
El crimen conmocionó al sector turístico de la zona, golpeado por el cierre forzoso de la pandemia.
La Cámara de Comercio, y Hoteles de Quepos, lideraba por el detenido Bodaan censuró el hecho y advirtió que hay “cero tolerancia” a
situaciones de estas.