PurpPeriodismo/Elecciones EE.UU. 2020/Imagen ABC News
Donald Trump estaba en un camino prometedor en Florida, manteniendo su estrecho camino hacia un segundo mandato, destacó el sitio Politico a las 8:42 p.m.
A las 9 p.m. Biden aventajaba a Trump en los votos del Colegio Electoral: 89-72.
Un estado obligado
Florida es casi un deber para Trump, y una victoria allí mantendría vivas sus perspectivas al principio de la noche de las elecciones, enfatizó dicho sitio.
Trump y Biden habían estado intercambiando pistas, pero Trump se había adelantado con más votos aún por contar y la carrera aún no estaba convocada.
Miami-Dade le falló a Biden
Tradicionalmente un referente, Biden hizo una campaña agresiva en Florida en un esfuerzo por acabar con Trump temprano. Pero, en los primeros resultados, Biden parecía haber tenido un rendimiento inferior en el condado de Miami-Dade, fuertemente demócrata, citó Politico.
Biden tenía una ventaja de aproximadamente 2 puntos porcentuales en Carolina del Norte y Florida antes del día de las elecciones.
Si Trump gana en ambos estados, como lo hizo en 2016, la nación se asentará para una larga noche, y posiblemente días, con conteos de votos prolongados en otros estados indecisos.
“Podría ser que Carolina del Norte sea el punto de inflexión”, dijo Pete Giangreco, un estratega demócrata que ha trabajado en nueve campañas presidenciales, agrega dicho medio.
“Podrías despertarte en algún momento del miércoles y AP ha llamado a Michigan, Wisconsin y Carolina del Norte … Pensilvania será como ‘Esperando a Godot'”.
Trump sin margen de error
Trump entró en la velada casi sin margen de error. Cerró la campaña a la zaga de Biden en los campos de batalla tradicionales y en riesgo de perder estados que alguna vez fueron republicanos confiables como Georgia, Iowa y Ohio, amplía Politico.
Incluso Texas, la más importante de las ambiciones del Partido Demócrata, parecía ser competitiva: Trump se aferra a una ventaja de solo 1 punto porcentual en el estado, según el promedio de encuestas FiveThirtyEight.
Los demócratas en Texas se sintieron animados por una votación anticipada que superó el recuento total de votos del estado de hace cuatro años, y por el rechazo de un juez federal el lunes a una oferta de los republicanos para descalificar casi 127,000 boletas emitidas durante la votación directa en el condado de Harris, que es muy demócrata.
Biden envió a su compañera de fórmula, Kamala Harris, al estado en la última semana de la campaña.
La elección terminó como comenzó: como un referéndum sobre un presidente impopular.
La frenética campaña de los últimos días desmentía la inusual estabilidad de la contienda, que no se vio afectada por una pandemia mundial, la hospitalización del propio presidente, dos debates presidenciales, millones de dólares en publicidad y un verano de disturbios civiles históricos, resalta Politico.
Ver: Politico
