Edgar Fonseca, editor/Foto OIJ
Cuarenta allanamientos y al menos 23 detenidos dejaron operaciones policiales y de la Fiscalía la madrugada de este martes contra una gran red narco que importaba cocaína de Suramérica y la exportaba a Europa, informó la Fiscalía y el OIJ.
Entre los investigados hay abogados y 4 agentes del OIJ sospechosos de estar vinculados al grupo criminal, se informó por parte del Ministerio Público.
Los líderes de la red fueron identificados por los apellidos James y Cartín.
Se informó que dentro de los bienes intervenidos hay un motel en Alajuela adquirido por esta organización, según las investigaciones.
El OIJ confirmó que a dicha organización le decomisaron ¢390.422.990,00. y $1.811.856.
Además, le intervinieron 80 bienes inmuebles y muebles, entre propiedades y vehículos.
Se confirmó oficialmente que la Fiscalía Adjunta contra el Narcotráfico y Delitos Conexos dirige 40 allanamientos con el fin de desarticular a un supuesto grupo criminal dedicado a traficar cocaína procedente desde Suramérica, almacenarla en diversas propiedades y exportarla a Europa, por medio de contenedores que salían desde Puerto Moín.
Según la Fiscalía, los allanamientos iniciaron a las 4 de esta madrugada y se realizan en Limón, Heredia, San José, Alajuela y Cartago. Hasta este momento, hay 21 personas detenidas. El OIJ informó de 22 detenidos.
La Fiscalía informó que, dentro del grupo de investigados, se encuentran personas con roles de líderes, logística, testaferros, abogados y notarios, encargados de legitimar capitales, y agentes del OIJ, a quienes se les atribuye brindar información sensible a la organización criminal.
Cuantiosas inversiones
Walter Espinoza, director del OIJ, estimó en al menos seis billones de colones las inversiones en propiedades y bienes de esta red.
“Dentro de los bienes que se pretenden decomisar hay propiedades en Escazú, Santa Bárbara de Heredia, Alajuela, Limón y otras zonas del país, así como varios vehículos, entre ellos uno que ronda los $385 mil. En total se pretende decomisar 80 bienes muebles e inmuebles”, confirmó Espinoza
“Se ha decantado por invertir los bienes que obtiene como consecuencia del hecho criminal en propiedades, bienes muebles e inmuebles, que nosotros hemos cuantificado registralmente en aproximadamente seis billones de colones, pero que de acuerdo con el valor de mercado que han considerado nuestros peritos, puede superar la cifra de $20 millones”, destacó el jerarca policial.
Según detalló, esta organización adquirió inmuebles en Escazú que superan -cada uno de ellos- los $2 millones.
Un motel en Alajuela en efectivo
“En el ámbito de lavado de dinero, este grupo adquirió un motel que tuvo un costo de $8 millones. La mayor parte fue pagado en efectivo”, narró Espinoza.
“Tiene propiedades en apartamentos, torres de condominios, una propiedad en Limón que es conocido como Beitos Place’s, que es una extensión de terreno impresionante y donde se pretende hacer un condominio”, amplió.
“Hemos ubicado una propiedad en Santa Bárbara de Heredia que tiene aproximadamente 10 hectáreas de extensión y que tiene construido varias estructuras que son utilizadas por el grupo criminal para actividades organizativas y de esparcimiento”, resaltó.
Involucran a abogados
Espinoza involucró en la red a abogados.
“Estructuraron un grupo de abogados -que van a ser abordados por el OIJ- que se encargaban de hacer los movimientos registrales, las escrituras y además, generar los pagos”, aseveró.
“En el área de legitimación de capitales, hicieron incursiones e inversiones importantes en una empresa constructora y del cultivo del arroz, porque estas actividades les servían a ellos filtrar el capital que estaban obteniendo, porque la mayoría de dinero que obtenían como consecuencia de la actividad criminal, lo estaban obteniendo en efectivo”, afirmó
Tras tres decomisos
Según el reporte oficial, dentro de la investigación, realizada en conjunto con el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), se indaga a 40 personas, bajo el liderazgo de dos hombres de apellidos James y Cartín.
Al grupo se le vincula con tres decomisos de droga. El primero, de 3.3 toneladas de cocaína que llegaron el 24 de febrero del 2020 a Puerto de Livorno, en Italia, en un contenedor que transportaba puré de banano.
El segundo cargamento fue de aproximadamente 1.862 kilos del mismo tipo de droga, que llegó a Valencia, España, el 16 de junio del 2020, en un contenedor que llevaba pulpa de piña. Cuatro meses después, el 15 de octubre, se ubicaron 10 kilos de cocaína que viajaban en un carro por el sector de Bello Horizonte de Escazú. El vehículo fue abordado por la Policía Municipal de ese cantón, lográndose la detención de los imputados Vega y Picado.