Edgar Fonseca, editor
La magistrada Eugenia María Zamora fue electa ayer jueves nueva presidenta del Tribunal Supremo de Elecciones(TSE).
Con 16 años de trayectoria como magistrada y nueve como vicepresidenta del TSE, sustituye al exmagistrado Luis Antonio Sobrado quien renunció debido al parentesco con una candidata a vicepresidenta en uno de los partidos participantes en las próximas elecciones.
Zamora es licenciada en Derecho por la Universidad de Costa Rica y máster en leyes por la Universidad de Harvard.
Será la primera mujer que preside el TSE en sus 72 años de existencia. Es magistrada electoral desde el año 2005 y Vicepresidenta del TSE desde el año 2009.
Según el TSE, el nombramiento rige a partir del 16 de diciembre, dado que la Presidencia del TSE quedó vacante tras la renuncia del exmagistrado Sobrado cuya labor como funcionario electoral concluyó el 15 de diciembre, con la entrega de su informe final de gestión.
Junto a la magistrada Zamora fue electo vicepresidente el magistrado Max Alberto Esquivel Faerrón.
Esquivel Faerrón integra el TSE desde el año 2007. Es licenciado en Derecho y en Ciencias Políticas, y especialista en Derecho Público, por la Universidad de Costa Rica, se informó.
La trayectoria y experiencia de los magistrados Zamora Chavarría y Esquivel Faerrón han contribuido claramente para que estos organismos electorales puedan concluir con absoluta pericia y confiabilidad procesos electorales prístinos y ejemplares, admirados en todo el mundo y su designación es garantía de seguir haciéndolo por mucho tiempo más; asimismo, en su recorrido de lustros como Magistrados de este Tribunal, ambos han asumido esas responsabilidades en incontables ocasiones con excelente suceso, responsabilidad y diligencia, justificaron los magistrados Luz Retana Chinchilla, Zetty Bou Valverde y Hugo Picado León al razonar su respaldo unánime a la designación de los nuevos jerarcas.
Destacaron el compromiso de los ahora Presidenta y Vicepresidente con la transparencia, con la eficiencia y la defensa de los valores democráticos los hace adecuados depositarios de tan relevantes cargos en la democracia más vigorosa y longeva de la región; sabedores de su integridad, prudencia, capacidad y buen juicio.
La elección se hizo lo dispone el artículo 20 del Código Electoral al establecer que el “Tribunal nombrará de su seno, y en forma conjunta, un presidente y un vicepresidente, por un período de tres años, y podrán ser reelegidos; […]”.
La magistrada Eugenia María Zamora, vicepresidenta del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), confirmó a este editor el 2 de noviembre que aspiraba a presidir la entidad tras la apresurada renuncia del magistrado Luis Fernando Sobrado.
“Claro que sí” respondió Zamora sobre su aspiración a una pregunta de este editor en una amplia entrevista que concedió para analizar las implicaciones institucionales de la salida del magistrado Sobrado, quien anunció su súbita renuncia el miércoles 27 de octubre debido a su parentesco con una aspirante a vicepresidenta de unos de los partidos inscritos para las elecciones del seis de febrero.
“Así se lo he hecho saber a mis compañeros y compañeras pero la decisión última será tomada por ellos después del 9 de noviembre o del 15 de diciembre cuando se haga efectiva la renuncia del doctor Sobrado”, ratificó sobre su pretensión.
“Si así lo disponen mis compañeros y el pleno del tribual, pues tendré el honor de ser la primera mujer en este poder de la República en este órgano especializado, el único poder que no ha tenido una mujer presidenta permanente en 72 años de existencia”, resaltó./ PuroPeriodismo entrevista
Zamora es magistrada propietaria desde el 5 de setiembre 2005 y ocupa la vicepresidenta del órgano electoral desde el 3 de setiembre 2009.
Enfatizó su experiencia de 16 años que le han permitido supervisar 8 elecciones y un referéndum, el de 2007.
Amplió que en este periodo también le ha correspondido, como vicepresidenta, sustituir al magistrado Sobrado en diferentes oportunidades.
Detalló sus distintas observaciones electorales en el continente, entre otras tareas.
