Edgar Fonseca, editor
El gerente general del Banco de Costa Rica, Douglas Soto, rechazó este martes la pretensión del presidente Rodrigo Chaves de poner en venta dicho ente bancario.
“Como funcionario del banco, en lo personal, no puedo estar de acuerdo”, afirmó Soto en una comparecencia ante diputados de la Comisión de Asuntos Económicos que analiza el plan de venta, un proyecto prioritario del presidente Chaves en el presente periodo de sesiones extraordinarias.
“Desde el punto de vista de vender, perdería el país una importante herramienta de desarrollo sostenible”, advirtió Soto tras consulta de la diputada Kattia Rivera, jefa de fracción PLN.
Se trata de una de las manifestaciones institucionales más fuertes, hasta ahora, en contra del plan gubernamental.
“El proyecto tiene muchísimas falencias y omisiones significativas, de un negocio tan complejo como el BCR”, ratificó Soto quien hizo su presentación acompañado del gerente jurídico del banco, Manfred Sáenz.
“Se vuelve bastante compleja la venta tal como está expuesta”, destacó el gerente Soto quién cree que no es el momento oportuno para dicha operación con la que el gobierno pretende sumar hasta 3% del PIB para amortizar la deuda pública.
El gobierno lanzó el plan el 16 de agosto al celebrar los primeros 100 días de gestión.
Según el presidente Chaves, el banco se ha visto afectado por casos de corrupción y de ineficiencia operativa.
El BCR tiene 163 oficinas en todo el país con 4.300 colaboradores, que incluyen subsidiarias; 3.900 empleados son del banco.
Tiene 75% de su cartera en colones y 25% en dólares, explicó Soto a los diputados.
Junto a la venta del BCR, el gobierno pretende también vender el banco BICSA de propiedad común del BCR y del Nacional.
Chaves también pretende la venta del 49% de las acciones del Instituto Nacional de Seguros (INS), plan que aún no llega a la corriente legislativa.
Según distintas encuestas, el plan de venta de dicho venta es rechazado por una mayoría de la opinión pública.
Las manifestaciones del gerente Soto se dieron un día después que magistrados de la Corte Suprema de Justicia cuestionaron la venta del BCR y el posible impacto en el Poder Judicial.