Edgar Fonseca, editor/Foto Facebook Rodrigo Arias
En un año en que la Asamblea Legislativa se convirtió en uno de los grandes contrapesos institucionales a las medidas del presidente Rodrigo Chaves, el jerarca del Congreso, Rodrigo Arias, fue reconocido ayer jueves por la cúpula empresarial del país, como el funcionario público más destacado del periodo.
El país enfrenta “inmensos retos y peligros”, advirtió Arias al aceptar la distinción.
El reconocimiento lo anunció la Unión de Cámaras del Sector Empresarial (UCCAEP) en un acto en que celebró el 50 aniversario de su fundación al cual invitaron al mandatario Chaves.
Inmensos retos y peligros
“Al mismo tiempo que reconocemos la profunda huella que ha dejado UCCAEP en el desarrollo nacional, esas grandes conquistas corren peligro de verse disminuidas ante los inmensos retos y peligros que hoy enfrenta nuestra patria”, remarcó Arias ante el conglomerado empresarial.
“La relación del Estado con la empresa privada va de la mano con una saludable vida democrática”, aseveró.
“Es –afirmó– la simbiosis más esencial de la vida republicana. Y se funda en que el Estado mismo encuentre coherencia interna”.
“Estoy profundamente conmovido por la distinción con la que me honran esta tarde, particularmente porque proviene de una organización comprometida con los más altos valores para el desarrollo y el progreso nacional”, respondió Arias ante el homenaje.
“Este reconocimiento lo comparto con cada uno de los ciudadanos que en el sector público o privado, trabajan duro por lograr un mejor país. Asamblea Legislativa de Costa Rica”, dijo.
Un contrapeso con guantes de seda
Arias ha ejercido un liderazgo legislativo de fluidez pero a la vez de marcar los desencuentros ante controversiales decisiones del presidente Chaves desde que asumió el poder el 8 de mayo.
Aunque ha evitado tensar las relaciones con el Ejecutivo y un equipo gubernamental que por primera vez asumía las riendas de gobierno, ha criticado puntualmente diferentes manifestaciones del mandatario que generaron desasosiego y resquemor en el ámbito legislativo.
“Utilicemos el lenguaje prudente de la razón y la Constitución. Evitemos el conflicto, las posturas autoritarias y enfoquémonos en resolver los grandes problemas que tenemos: inseguridad, desempleo, estancamiento económico, alto costo de la vida”, reclamó Arias a Chaves el pasado 26 de enero luego que el gobernante intensificó cuestionamientos al Poder Judicial y la Fiscalía por la desestimación de un supuesto megacaso de evasión fiscal.
A raíz de dicho caso, Chaves advirtió que pretendía que la Procuraduría se sumara como parte acusadora, lo cual generó reacciones críticas desde la Asamblea Legislativa y otros sectores por alegada interferencia de poderes.
La tensión entre poderes ha estado latente desde el inicio de la administración.
El 25 de julio en Nicoya, Chaves acusó a los diputados de “jugar a las chapitas” con el retraso en el trámite de un proyecto de endeudamiento por $6.000 millones en eurobonos, finalmente aprobado.
Su afirmación desató airadas reacciones en el sector legislativo que derivaron en una cita entre Arias y Chaves el 9 de agosto.
“Creo que hemos tratado de subrayar coincidencias en nuestros puntos de vista, pero también de fomentar canales de comunicación para superar las discrepancias propias de una comunidad pluralista como la nuestra, en la que estamos obligados a abordar con convicción democrática la diversidad de opiniones que se manifiestan tanto al interior de la propia Asamblea como en las relaciones de ésta con el Poder Ejecutivo”, sostuvo Arias tras dicho encuentro.
“Vine porque me interesa muchísimo escuchar los consejos de don Rodrigo. Obviamente no hubo negociación de nada, nada más un intercambio de opiniones”, comentó Chaves de la reunión.
El funcionario público que llega a dormir a la Asamblea Legislativa, que ha dejado el control a dos diputados nefastos, Dinorah Barquero y Francisco Nicolás quienes junto con el Frente Amplio destruyen el que hacer legislativo.