El periodista salvadoreño Oscar Martínez, Premio a la Libertad de Expresión de Deutsche Welle en 2023, habla de los riesgos que corren los periodistas en Centroamérica, en un discurso pronunciado durante el Global Media Forum, en Bonn.

“El Salvador, de donde yo vengo y a donde volveré tras recibir este premio, camina a paso firme hacia convertirse en una dictadura plena. Ya no es una democracia. Algunos tanques de pensamiento lo describen como un régimen híbrido. Que conserva algún maquillaje demócrata, pero que en esencia es un régimen autoritario. Principalmente periodistas, fuimos sometidos a 17 meses de espionaje con Pegasus, y no hay ninguna investigación seria al respecto. Solo en mi medio, El Faro, 22 personas fuimos intervenidas cuando, entre otras investigaciones, reuníamos pruebas sobre el pacto secreto del presidente con las pandillas criminales. Se han creado leyes mordaza que pueden meter preso hasta por 30 años a un periodista que revele información vinculada a pandillas o a sus pactos con el poder si un juez considera que dicha información genera “zozobra”. ¿Quién define qué es zozobra? Los jueces del régimen. Recién hace dos semanas, el jefe de la policía dijo que irían por los periodistas, que pronto la gente nos verá enjuiciados y encarcelados”.

Especial PuroPeriodismo/DW, Alemania