Edgar Fonseca, editor/Foto Seguridad CR
Mientras se vive una emergencia en la frontera de Paso Canoas con la llegada de al menos 12.000 de migrantes, en su mayoría, venezolanos, la embajadora de EE.UU. en San José, Cynthia Telles, ratificó ayer martes las prohibiciones de la administración Biden para impedir la llegada de esas personas a suelo norteamericano.
El flujo de unos 2.500 migrantes diarios mantiene bajo tensión la zona limítrofe.
Según Migración en la semana del 17 al 23 de julio arribaron 12.153 migrantes; 60 % venezolanos; 13% ecuatorianos y 10% haitianos.
El gobierno de Estados Unidos instó a los migrantes a viajar de manera legal hacia Estados Unidos y les recuerda que quienes lleguen a su frontera de manera irregular serán procesados y devueltos con rapidez hacia su país de origen, cita un comunicado de la embajada.
Telles pidió a los migrantes no creer en las mentiras de los traficantes, que los exponen a extorsiones, secuestros y otras situaciones que ponen en riesgo la vida de los migrantes.
“Todas aquellas personas que ingresen a Estados Unidos sin cumplir los requisitos legales podrían enfrentar severas consecuencias, como la prohibición de reingresar a Estados Unidos por un periodo de cinco años y hasta enfrentar cargos criminales y perderse la posibilidad de acogerse a otros procesos legales para ingresar en el periodo”, afirmó.
“Quienes no cumplan las leyes migratorias vigentes, serán devueltos en cuestión de días o semanas”, advirtió.
“La orden migratoria estadounidense de salud pública se terminó el 11 de mayo, pero de todos modos Estados Unidos va a reforzar sus leyes migratorias para procesar y devolver rápidamente a quienes hayan llegado a la frontera de manera irregular”, añadió.
“Quienes ingresan sin cumplir los requisitos legales podrían enfrentar consecuencia muy severas que incluyen la prohibición de reingresar a Estados Unidos por 5 años y hasta enfrentar cargos criminales”, sostuvo la diplomática.