Edgar Fonseca, editor
“No podemos sentirnos victoriosos porque, desde el 2 de julio del año pasado, falta un abrazo y un beso en nuestro hogar, cuando hay días que se suponen son de celebración como lo son el Día de la Madre, el Día del Padre, Navidad, Año Nuevo, nuestros cumpleaños y los de nuestras otras dos hijas”, comunicó la familia del joven Marco Calzada tras el juicio en que fueron sentenciados ayer dos de los acusados.
Fuerte pena
Dos hermanos imputados por el homicidio del joven Calzada, de 19 años, perpetrado el 2 de julio 2022 a la entrada del denominado barrio Chino, San José, fueron sentenciados ayer martes a fuertes penas.
El anuncio lo hizo el Tribunal Penal del I Circuito Judicial de San José.
Fueron sentenciados los hermanos Josué Daniel y Justin Manuel Rojas López, de 22 y 20 años, a 24 años de prisión por dicho homicidio y siete más por robo agravado.
La pena se adecúa a 24 años por razones procesales penales.
La sentencia cierra un capítulo de un caso que estremeció al país hace un año y un mes al trascender el ataque contra Calzada descrito por sus padres como un muchacho diferente, incapaz de hacerle mal a nadie, fervoroso en lo espiritual, líder, solidario, boxeador, quien iniciaba sus estudios de Ingeniería de Datos en Lead University.
Calzada fue víctima de la agresión tras salir de un bar del sector en aquella ocasión.
Pereció víctima de varias puñaladas en el cuello.
Por este hecho, fueron sentenciados en noviembre anterior tres menores: dos de 17 años y otro de 14 años vinculados al suceso por las autoridades.
Los sentenció el Tribunal Penal Juvenil que aplicó: 13 años y 6 meses (de internamiento) a los dos de 17 años, y 8 años al de 14 años.
Les cambió la vida
Mario Calzada y Gabriela Valverde, padres de Marco, fueron los primeros en declarar ante el tribunal el 5 de julio.
Relataron que el hecho les cambió su vida.
“Aunque la vida de nuestro hijo no va a ser devuelta, sí queremos justicia, no solo para nosotros, sino también para otras familias, por las vidas que son arrebatadas de manera violenta, por estos hechos que son tan dolorosos”, dijo Balverde en su declaración ante los jueces Isabel Porras, Laura Sánchez (presidenta) y José Rafael Bolandi.
Como una onda expansiva
“Nos empezamos a preocupar. Yo sabía que él no daría el teléfono como medio de pago. Revisamos y no había transacciones de las tarjetas tampoco. Luego un conocido de un amigo nos dijo que atendió un caso que coincidía las descripciones de ropa, fuimos a identificar el cuerpo mi esposa y yo y era él”, recordó del día del suceso su padre Mario Calzada..
“Esto es como una onda expansiva que no sabemos todavía si vamos a asimilar”, reconoció Calzada ante el tribunal.
“Marco desde que nació era diferente, un líder completo, nunca fue capaz de hablar mal de nadie. Era un chiquillo de 19 años que se levantaba los sábados, ayudaba en obras sociales, boxeaba, hacía deportes, tocaba en misas y en la noche salía con sus amigos, ese día lo hizo como cualquier otro”, enfatizó.