2023 cierra con otro revés para las autoridades en la frustrada cacería de alias Diablo/Se esconde en Nicaragua, aseguran/Ven “golpe estructural” a su red

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Edgar Fonseca, editor/Foto OIJ

Pese al gigantesco operativo policial del lunes anterior, 2023 apunta a cerrar, de nuevo, con sabor agridulce para las autoridades en sus esfuerzos por dar con el paradero del fugitivo más buscado, Alejandro Arias, alias Diablo, a cuya organización criminal se atribuye buena parte de la saga de violentos hechos que estremecen al país con cifras récord de homicidios.

Aunque el OIJ resaltó el operativo como la desarticulación de la organización de Arias, con la captura de familiares cercanos, su padre, de apellido Arias, de 64 años, su pareja sentimental, Jiménez, 29 años quien presume en redes de su relación, y otros allegados clave, la ubicación del principal objetivo no se consumó.

Álvaro Ramos, exministro de Gobernación y analista de seguridad, ve como “estructural” el golpe asestado esta semana a la organización criminal que lidera Arias.

“Ya lo había golpeado en su operación de lavado”, enfatizó.

Está en Nicaragua

Según Ramos, el fugitivo se esconde presumiblemente en Nicaragua.

“Pura zona fronteriza”, aseveró cuando se le consultó sobre la imposibilidad de las autoridades para ubicarlo.

Según dicha fuente, es probable que estos operativos amainen la violenta saga de acontecimientos con que se relaciona a dicho red criminal.

En Pococí, Cariari, sí habrá efecto, reconoció.

Máximo despliegue

Un total de 600 agentes, encabezados por el director del Organismo de Investigación Judicial, Randall Zúñiga, desarrollaron el lunes la operación denominada Redención con el saldo de la captura de decenas de supuestos colaboradores o vinculados a la red criminal en el Atlántico y otros sectores, incluso dos individuos de apellidos Aragón, padre e hijo,dueños de una importante red supermercados en la zona.

Hubo 40 allanamientos con el fin de atrapar a 29 sospechosos, entre ellos al padre del fugitivo y a su compañera sentimental en un definido plan para desmantelar la red delincuencial que tiene en jaque a a las autoridades y a la zona caribeña, con amenazas de extender sus operaciones otras partes del país, consignó el reporte oficial de las acciones.

Les atribuyen conformar una agrupación criminal dedicada al tráfico de estupefacientes, legitimación de capitales y otros delitos.

OIJ sostiene que este grupo criminal se ha dedicado mayormente al almacenamiento, distribución y comercialización de estupefacientes, además, se les relaciona con varios homicidios dolosos.

Entre las personas por detener se encontraban tres mujeres y 26 hombres, enfatizó el reporte oficial de las operaciones.

Las acciones policiales se realizaron en las localidades de la provincia de Limón: Santa Rosa, Colorado, Ticabán, La Rita, Pococí, Roxana, Barra del Colorado; El Tanque y La Fortuna de San Carlos.

Se extendieron a Coronado y Montes de Oca en San José y Sarapiquí en Heredia.

Aparte de detener a estas personas, se pretendían realizar el decomiso de alrededor de 600 cabezas de ganado, pues en apariencia se ha podido corroborar que está organización se dedica a la legitimación de capitales por medio de la compra-venta, así como la adquisición de bienes inmuebles (fincas), vehículos de alta gama y diferentes locales comerciales.

Entre las personas que se pretendían detener figuraban personas de confianza de alias “Diablo”, principalmente familiares.

“El mejor jugador de fútbol del planeta no puede ganar la Copa del Mundo sin el equipo”, justificó el director OIJ del operativo.

Los detenidos fueron presentados ante el Ministerio Público, para que se les determinara su situación jurídica, diligencia pendiente.

Pero la ficha clave se escabulló, una vez más.

Desde 2019 se han ejecutado distintos operativos fallidos y ahora hasta se habla de contar con el apoyo de autoridades estadounidenses para atraparlo.