Edgar Fonseca, editor
Los sistemas democráticos de Costa Rica, Chile y Uruguay figuran dentro de los primeros 20 en el mundo, destaca el más reciente informe anual del organismo global IDEA Internacional.
Dicho ente, cuyo Secretario General es el exvicepresidente Kevin Casas, se dedica a la promoción de la democracia y elecciones a nivel internacional.
Costa Rica figura en el puesto 13, Chile, 4, y Uruguay, 9, según el informe.
Trece de las naciones de la región aparecen en los primeros 50 puestos a nivel global.
Los declives más significativos los registran El Salvador, 95, Guyana, 87, y Haití, 157, precisa el estudio.
Entorno complejo y en contracción
El estado global de la democracia en 2023 es complejo, fluido y desigual, advierte el informe.
Destaca que en todas las regiones del mundo la democracia ha seguido contrayéndose, y la mitad de los países incluidos en el informe registraron declives en al menos uno de los indicadores del desempeño democrático.
Enfatiza que la democracia sigue en problemas, estancada en el mejor de los casos y en retroceso en muchos lugares.
Sin embargo, añade, hay algunas razones para mantener la esperanza (en particular, la disminución de la corrupción y los niveles sorprendentemente altos de participación política).
Hay esperanza
El reporte menciona que si bien el análisis del estado de la democracia en el mundo en 2023 indica que se produjeron algunos declives en países que se consideraban democracias saludables, también se identificaron avances alentadores en países que han experimentado durante años constantes niveles de opresión.
El informe de este año, agregan, destaca el papel de las denominadas instituciones de contrapeso para detener la erosión de las instituciones democráticas y reaccionar ante la consolidación de las fuerzas autoritarias.
El contrapeso institucional
Resaltan que el concepto de instituciones de contrapeso va más allá de lo que tradicionalmente se ha definido como sistema de pesos y contrapesos para abarcar aquellas instituciones, organizaciones y movimientos gubernamentales y no gubernamentales que controlan la extensión y los excesos del poder y equilibran su distribución para garantizar que los responsables de la toma de decisiones consideren regularmente las prioridades populares en las políticas.
Las instituciones de contrapeso comprenden entidades relativamente nuevas como las instituciones nacionales de derechos humanos y los organismos electorales, así como las redes de la sociedad civil, los movimientos populares y el periodismo de investigación, que desempeñan un papel insustituible para garantizar que la democracia siga siendo de y por el pueblo.
Ante las amenazas?
¿Qué se puede hacer para enfrentar las amenazas, tanto agudas como crónicas, que ponen en riesgo a la democracia? Las recomendaciones de política presentadas en esta nueva edición de El estado de la democracia en el mundo y las Américas 2023 incluyen: (a) apoyar los procesos electorales, con énfasis en mecanismos que garanticen la participación y la competencia justa; (b) impulsar la transparencia y el acceso a la información en los parlamentos a fin de multiplicar las fuentes de rendición de cuentas; (c) promover el pleno compromiso de los gobiernos para proteger el espacio cívico, y (d) garantizar la protección legal de la independencia de las instituciones que velan por las elecciones, investigan la corrupción y supervisan los programas gubernamentales.