PuroPeriodismo/Foto Facebook Cámara Ovsicori volcán Poás
El volcán Poás sorprendió ayer domingo a los visitantes con dos pequeñas erupciones freáticas de gases y partículas finas.
Muchas personas visitantes en el #VolcánPoás ayer 14 de enero 2024, alrededor de las 9 am, disfrutaron de una vista excelente y sobre todo de estas pequeñas erupciones, confirmó Ovsicori-UNA.
El riesgo
El mayor riesgo para los visitantes del parque es la exposición a los gases y partículas finas, destacó un reporte de dicho ente en 2014 tras una serie de erupciones de ese tipo.
El volcán Poás se encuentra actualmente en un ciclo de erupciones freáticas que comenzó en marzo del 2006 y fue precedido por cambios geofísicos y geoquímicos drásticos desde marzo del 2005, agregó el reporte de esa ocasión.
Las erupciones freáticas se han venido presentando en forma esporádica, la mayoría de ellas generan columnas de materiales eyectados que no superan los 10‐50 metros. En algunos períodos las erupciones freáticas son más frecuentes y vigorosas, como las observadas en los años 2011, 2012, y 2014 que produjeron columnas de varios cientos de metros de altura (100 ‐ >300 m).
Las erupciones más energéticas del 2014 ocurrieron el 2 de junio y el 8 y 13 de octubre, 2014. La erupción del 13 de octubre generó caída de partículas finas sólidas y líquidas en el sector al sur del cráter activo abarcando El Mirador, el Centro de Visitantes, el parqueo del Parque Nacional Volcán Poás e inclusive Fraijanes lo que motivó a los administradores del parque nacional a activar el protocolo de control de visitantes.
La distribución y caída de partículas finas hacia el sur fue claramente influenciada por la dirección predominante de los vientos al momento de la ocurrencia del evento freático.
El mayor riesgo para los visitantes del parque es la exposición a los gases y partículas finas que pueden llegar hasta el mirador y depende principalmente de la dirección del viento en el momento de la explosión, advirtió el reporte entonces.
Las erupciones freáticas son comunes en el lago caliente y ácido del Volcán Poás, destacó otro informe en 2006.
Tales erupciones involucran una salida violenta de gas, desde el fondo del lago, que arrastra materiales del fondo con agua acida y caliente. Cuando los materiales finos (sedimentos) superan el borde del cráter volcánico, los vientos arrastran las partículas finas hasta grandes distancias.
Las erupciones freáticas mezclan los sedimentos acumulados en el fondo del lago, lo cual produce cambios en el color del lago. Otras características físico-geoquímicas también muestran cambios significativos asociados con cambios en el flujo de calor y gases que son inyectados debajo del lago y que provienen del cuerpo magmático que se encuentra debajo del lago caliente del Poás, añadió dicho reporte.