Edgar Fonseca, editor/Foto Zoom PuroPeriodismo
La viabilidad de una coalición electoral presidencial opositora con miras a 2026 es imposible, advirtió ayer el expresidente PLN, Dr. Francisco Antonio Pacheco.
La idea planteada el 13 de febrero por el excandidato presidencial verdiblanco, Antonio Álvarez Desanti, generó inmediata y fuerte reacción de rechazo de algunos dirigentes de otros partidos aludidos o convocados.
Para Pacheco, exministro y exdiputado, la propuesta fue “intempestiva, precipitada e inoportuna” y la hace inviable, según sostuvo en una amplia entrevista que concedió a este editor vía Zoom Facebook Live ayer lunes 19 de febrero.
Calificó, además, de “incomprensible” la salida del excandidato quien, por un lado, según Pacheco, ha movido intereses a lo interno de Liberación para ser el próximo aspirante y, por otro, asegura que el partido no tiene oportunidad de éxito tras el fracaso en los recientes comicios municipales en perdió 15 alcaldías.
Plantearla de manera “directa, abierta e inmediata” la hizo imposible, según su análisis.
Una eventual coalición, dijo, pasa por conversaciones, acercamiento y persuasión progresiva entre dirigentes, lo cual no ocurrió en este caso.
Además, destacó, fue un error de Álvarez extrapolar los resultados de las elecciones municipales al ámbito nacional, dos entornos de competencia muy diferentes.
“Mucha tela que cortar”
El expresidente PLN, cree, además, que habrá que ver el comportamiento del electorado en los dos años venideros, el grado de respaldo o popularidad del gobierno.
“Queda mucha tela que cortar”, insistió Pacheco quien sí le ve oportunidad al PLN de retornar a la presidencia pero bajo la renovación de su liderazgo.
El partido debe apostarle a un candidato “convincente, preparado, relativamente nuevo, que genere empatía con el electorado”, desafió.
Quienes hayan sido candidatos no deberían presentarse, advirtió.
Ratificó que el partido cometió un error en 2022 al postular al expresidente, José María Figueres, con la saga de percepciones negativas que arrastraba aunque, reconoce, por su experiencia, pudo haber sido una mejor opción de gobernabilidad para Costa Rica.
Rechazó que el PLN no haya entrado en autocrítica tras sus tres recientes fracasos electorales presidenciales 2014, 2018, 2022.
Según Pacheco, dicho partido es el de mayor autocrítica, lo cual, por decisiones adoptadas, le costó respaldo en elecciones como en las pasadas municipales.
“Vivimos autocriticándomos, más que criticando a los demás”, afirmó.
Los muertos que vos matáis…
Ve exagerados los vaticinios de opositores que dan por muerto al PLN.
“Eso lo vengo oyendo por décadas”, ironizó.
La eventual desaparición del partido sería una pérdida para el contrapeso institucional y la lamentarían hasta quienes la desean, reflexionó.
Defendió el papel del bipartidismo (PLN-PUSC) y su influencia como bandos antagónicos en la reciente historia política del país.
De los pasados comicios municipales dijo que todos se dicen ganadores y coinciden en atacar al PLN.
En el caso del PUSC calificó de ficticia su ganancia de alcaldías.
El PUSC pasó de 15 a 20 alcaldías y sus dirigentes lo celebran como un renacer el partido fuera de gobierno desde 2006.
“Me alegro que la Unidad tenga algún éxito pero es ficticio”, aseveró.
“Es un espejismo”, sentenció. Incluso, dijo, recibieron 2% menos de votos que en los comicios 2020.
Chaves gran comunicador, inteligente
De la administración del presidente Rodrigo Chaves, cree que el gran reto del mandatario, a casi dos años de periodo, es retomar la senda de salvar la institucionalidad del país en consenso con los demás sectores.
Le reconoce un gran talento de comunicación que sabe aprovechar las ocasiones pero le ha hecho daño en el sentido que no se ve una obra real del gobierno, cosas verdaderamente significativas.
“Él le echa la culpa a las instituciones. Con eso tiene que contar cada gobernante. Todo gobernante ha sentido ese límite y muchos han hecho cosas valiosas para el país”, añadió.
“Es muy importante que retome el camino correcto de salvar la institucionalidad para unir distintas fuerzas con un común denominador de convergencia. Que las instituciones resistan presiones, no del gobierno de Chaves, sino de los que vengan”, enfatizó.
“Un país no puede vivir en conflicto con relación a las instituciones más valiosas”, remarcó.