Edgar Fonseca, editor/Foto X FCRF
Ante su eterno rival de Concacaf, la Sele se juega esta tarde-noche un juego de todo a nada por el último boleto, repechaje, para la Copa América.
Honduras es una incógnita en medio de sensibles bajas pero advierten que van por el boleto.
El juego está programado para las 5:15 p.m. en el Toyota Stadium, Dallas.
El técnico nacional, Gustavo Alfaro, tras un silencio de más de un mes, destacó ayer en Frisco, Texas, que espera que los seleccionados le demuestren en la cancha lo que han evidenciado en los entrenamiento.
Bajo el mando del estelar mundialista, Keylor Navas, la Sele pretende volver a generar confianza en una afición decepcionada por recientes reveses ante Panamá, en la Liga de Naciones, y el desteñido papel en el Mundial Catar 2022 y en Copa Oro.
La Copa América se disputará en EE.UU. del 20 de junio al 14 de julio.
“Esto es un proceso”
“Me siento muy bien y cómodo, estoy feliz por la actitud de los muchachos. Trajimos 26 jugadores, más allá de los 23 que pedía el reglamento. Queríamos traer a Andy Rojas y no pudimos conseguirle la visa”, comentó el estratega Alfaro.
“Estamos en un proceso de recambio generacional, porque es esa conjunción de jugadores con experiencia y esa sangre joven de Costa Rica que es muy buena y me genera una expectativa muy linda”, elogió.
“Debemos parir una nueva selección. A veces el parto viene de nalga y es muy doloroso y hay que hacerlo”, advirtió.
“Me llamaron para hacer un proceso y en ese camino estamos”, remarcó.
“Ojalá los chicos puedan expresar en el terreno de juego ante un rival muy difícil, con orden, con agresividad bien entendida”, planteó.
“Ojalá los muchachos puedan mostrar lo que me han mostrado en los entrenamientos. Hemos trabajado línea de cuatro y de cinco para buscar esas sociedades que todo equipo necesita”, dijo.
“Llegamos de la mejor manera y vamos a tratar de dar lo mejor”, destacó.
“Tenemos que tratar de formar un grupo, que las convocatorias no cambien de una a otra, necesitamos encontrar una base y en eso estamos”, agregó.
Se cura en salud
“Si hay algo que el fútbol no puede garantizar son los resultados”, advirtió.
El fútbol no vende seguros o medidas contra el fracaso”, se curó en salud ante un eventual revés frente a Honduras.
“Si acá el éxito o fracaso lo determinamos en el tercer partido, eso depende de los factores en que queramos medirlos”, enfatizó
“La carrera no se gana en la primera curva, se gana cuando baja la bandera”, argumenó.
“Me trajeron para un recambio generacional y clasificar al Mundial y estoy en ese proceso”, insistió.
Nada contra la prensa
“Yo la verdad no tengo problemas en absoluto, hablo cuando corresponde hablar. Tampoco es sano hablar todos los días permanentemente. Hay un espacio para trabajar y otro para hablar. Hablo cuando tengo que hacerlo. Hace 31 años soy entrenador y mis conductas son las mismas, son pocas las notas que doy. No es porque no quiera darlas, pero si le doy a uno, los demás tienen derecho a tenerlas”, aclaró.
“Las cosas hay que explicarlas cuando son los momentos. No tengo nada que ocultar y entiendo el juego, porque trabajé en los medios en una cadena de Colombia y vi cómo procesan los medios del otro lado. Queremos aprovechar al máximo el tiempo cuando tenemos la oportunidad de estar con los muchachos. Estamos abocados a eso”, sostuvo.
“Me genera mucho placer trabajar con este plantel, ojalá ustedes pudieran ver la actitud y disposición que tienen los muchachos. Son tiempos donde sentimos que debemos estar encerrados para adentro, después habrá tiempo para todo”, dijo.