Carlos Francisco Echeverría, exministro de Cultura
Es comprensible la tristeza de Brisa Hennessy por no haber ganado una medalla. Sin embargo, hay que poner las cosas en perspectiva.
En los demás deportes, ya sea que se compita en una pista, una cancha o una piscina, las condiciones son siempre iguales, o al menos muy estables, para todos los competidores. Los resultados que dan pie a las premiaciones son, en general, incontestables.
Pero el surf es diferente. Se juega en una cancha impredecible y cambiante, y aunque hay reglas que procuran homologar las condiciones para los distintos competidores, las cosas no son tan claras ni tan simples como en otros deportes. Esto no quiere decir que los premios sean injustos o inmerecidos. Responden a normas y formas de evaluación objetivas.
Pero, por las contingencias a las que está sujeto el deporte, no se puede afirmar que quien gana un torneo es sin duda el mejor surfista de todos, ni siquiera el mejor del momento.
Una hora más tarde o más temprano tal vez hubiera sido el tercero o el quinto.
Por eso en surf, más que en otros deportes, el gran logro es mantenerse en la élite.
Un día vas a ser el #1, como lo fue Brisa hace poco, otro día no.
Las medallas son un bonito adorno, pero nada más.
La proeza es estar entre quienes luchan por ellas en el máximo nivel. Todos las merecen.
Fuente: Facebook Carlos Francisco Echeverría