Edgar Fonseca, editor/Foto Guanacaste Airport
El abrupto cierre de operaciones del aeropuerto internacional Daniel Oduber de Liberia, desde el fin de semana, impactará hasta el jueves 21 de noviembre, 223 vuelos, entrantes y salientes, a las puertas de la temporada alta de turismo, confirmó la concesionaria Coriport.
Viernes 15 y 16 y sábado hubo 84 operaciones canceladas y se vieron afectados 11.929 viajeros, 5.857 entrantes y 6.072 salientes.
Domingo 17 fueron 11 los vuelos afectados, dos de ellos desviados a Managua debido al cierre del Oduber y a adversas condiciones climatológicas en el Santamaría. Afectaron a 1.429 pasajeros: 424 entrantes y 1.005 salientes.
Debido a la suspensión total de operaciones ordenada por Aviación Civil, desde este lunes 18 a las 9 a.m. hasta el jueves a las 6 a.m., se verán afectados 62 vuelos programados entrantes y 66 de salida.
Se trata de la mayor emergencia en el tráfico aéreo del país desde la pandemia Covid-19 en 2020 cuando fueron suspendidas todas las operaciones de marzo a agosto.
Hasta el jueves y pese a la gravedad de las condiciones climatológicas en la zona no había suspensión de operaciones.
El viernes Guanacaste Airport informó en la red X a las 8:05 a.m. la cancelación de vuelos.
Ayer domingo informaron hasta las 7:20 p.m de la suspensión que regía desde las 4 p.m. y comunicaron que mantenían los vuelos para este lunes 17.
Para mañana tenemos previsto 47 operaciones y 17 adicionales que han sido reprogramadas de los días anteriores. Se estima un alto volumen de tránsito de pasajeros durante el día por lo que le rogamos su comprensión, añadieron.
Aviación alega daños en la pista por lluvias
Casa Presidencial, el jerarca MOPT, Mauricio Batalla, y el Instituto Costarricense de Turismo (ICT) guardaban silencio este lunes sobre la atropellada cancelación de operaciones en el segundo mayor aeropuerto internacional del país con alto flujo de visitantes estadounidenses, canadienses y europeos.
Luis Miranda, subdirector de Aviación Civil, justificó la súbita medida por daños en la pista producto de las torrenciales lluvias de las últimas dos semanas que provocaron desbordamientos e inundaciones y al menos 3.500 evacuados en distintos sectores de Guanacaste, Puntarenas y el sur del país.
En Sardinal de Carrillo y La Cruz, no lluvia tan intensamente desde 1997, según registros del Instituto Meteorológico Nacional.
“Debido a la cantidad inusual de lluvias manifestada durante los últimos días, se han manifestado algunos daños en la pista del aeropuerto internacional Daniel Oduber Quirós”, explicó.
“Se ha valorado la posibilidad de hacer intervención con asfalto en caliente que permita que las reparaciones sean duraderas”, añadió.
Dijo que el cierre por 72 horas es para atender los trabajos que ya se han hecho en asfalto en frío en caso de que sea necesario reforzarlos con asfalto en caliente y poder hacer una evaluación integral del estado de la pista donde se garantice su correcta operatividad.
Las recientes cancelaciones no nos permiten dar el servicio de calidad a la que están acostumbrados nuestros socios comerciales y pasajeros, lamentó la concesionaria Coriport
Pedimos a nuestros pasajeros ponerse en contacto con sus aerolíneas para reprogramar su vuelo a la mayor brevedad y no trasladarse a la terminal, añadieron.
El sector empresarial turístico censuró las actuaciones del gobierno a punto de iniciar la temporada alta de turismo desde Norteamérica y Europa.
Martí Jiménez, residente de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur) criticó el desorden operativo generado por la reapertura y posterior cierre, sin previo aviso, de la pista de aterrizaje del aeropuerto.
Calificó de “decisiones intempestivas” lo actuado desde el ámbito gubernamental con evidente perjuicio para la imagen turística país y del sector empresarial.
La falta de previsión y coordinación es inaceptable”, cuestionó.
“Los turistas quedan atrapados sin poder llegar o salir del país según lo planeado, y las aerolíneas enfrentan un caos logístico”, deunció.
“El gobierno falla en su deber de brindar soluciones eficaces y claras para gestionar esta emergencia”, sentenció.
Canatur condena desorden y la falta de claridad del gobierno en la crisis del aeropuerto Daniel Oduber Quirós
La Cámara Nacional de Turismo (Canatur) manifiesta su indignación ante el desorden operativo generado por la reapertura y posterior cierre, sin previo aviso, de la pista de aterrizaje del Aeropuerto Internacional Daniel Oduber Quirós en Liberia.
Esta caótica situación sumada a otras intervenciones que ha requerido la pista de aterrizaje estaría provocando un fuerte daño a la imagen de Costa Rica como destino turístico, afectando la credibilidad de las aerolíneas y, sobre todo, la experiencia de los turistas, quienes enfrentan enormes inconvenientes e incertidumbre.
El impacto de estas decisiones intempestivas no solo es reputacional, sino también económico. Las pérdidas recaen exclusivamente sobre el sector privado, ya que el gobierno no asumirá los costos asociados a la reprogramación de vuelos, las penalidades por cambios de última hora ni las compensaciones a los turistas afectados. Este panorama no solo desincentiva el turismo, sino que también perjudica a las comunidades locales y empresas que dependen de esta actividad para su sustento.
“La falta de previsión y coordinación es inaceptable. Los turistas quedan atrapados sin poder llegar o salir del país según lo planeado, y las aerolíneas enfrentan un caos logístico. El gobierno está fallando en su deber de brindar soluciones eficaces y claras para gestionar esta emergencia”, señaló Martí Jiménez, presidente de Canatur.
Además, Canatur destaca la ausencia de información clara y oportuna para el sector turismo. La Cámara reitera que las autoridades deben asumir su responsabilidad y garantizar un manejo más ordenado de la situación. Los turistas, quienes son los principales afectados, merecen un trato digno y una respuesta efectiva que refleje el compromiso de Costa Rica con el turismo de calidad.
“Exigimos al gobierno certeza en la reapertura del aeropuerto, sino también un plan de acción claro que incluya plazos específicos y garantías para evitar más improvisaciones. Esta falta de seriedad compromete nuestra competitividad como destino y mina la confianza de quienes eligen Costa Rica como su lugar de vacaciones”, agregó Jiménez.
Canatur alza la voz para exigir soluciones inmediatas y medidas concretas que brinden certidumbre al sector turístico. El país no puede permitirse perder la confianza de los mercados internacionales ni el prestigio que tanto esfuerzo ha costado construir.
Fuente: Facebook Canatur
