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El Papa Francisco pasó una novena noche tranquila en el hospital Gemelli de Roma, donde está siendo tratado por una neumonía doble, informó este domingo la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
El Papa Francisco pasó una novena noche tranquila en el hospital, publicó la Oficina de Prensa de la Santa Sede el domingo por la mañana, emitiendo su última nota a los periodistas mientras el Santo Padre está siendo tratado por una neumonía doble en el Hospital Gemelli de Roma, confirma el sitio oficial Vatican News.
También esta mañana, el Papa utilizó cánulas nasales para la administración de oxígeno de alto flujo. Otros exámenes clínicos están en curso. El boletín médico de esta tarde arrojará luz sobre los resultados.
El sábado por la noche, la Oficina de Prensa emitió el siguiente informe vespertino sobre la salud del Santo Padre:
La condición del Santo Padre continúa siendo crítica. Por lo tanto, como se explicó ayer, el Papa no está fuera de peligro. Esta mañana, el Papa Francisco sufrió una crisis respiratoria similar al asma de intensidad prolongada, que requirió la administración de oxígeno de alto flujo.
Los análisis de sangre de hoy también revelaron trombocitopenia, asociada con anemia, que requirió la administración de transfusiones de sangre. El Santo Padre permanece alerta y ha pasado el día en un sillón, aunque más cansado que ayer. Por el momento, el pronóstico es reservado.
En una conferencia de prensa en el hospital Gemelli de Roma, el viernes por la tarde, el doctor Sergio Alfieri, jefe del equipo que atiende al Papa, y el doctor Luigi Carbone, vicedirector del servicio sanitario del Vaticano, hablaron durante unos cuarenta minutos ante una sala repleta de periodistas.
Ambos dijeron que creían que el Papa estaría hospitalizado “al menos” toda la próxima semana, y que el Papa Francisco no está “en peligro de muerte”, pero tampoco está completamente “fuera de peligro”.
No está con respirador
El doctor Alfieri subrayó que el Papa no está conectado a un respirador, aunque todavía tiene dificultades para respirar y, en consecuencia, mantiene limitados sus movimientos físicos. Sin embargo, el médico dijo que el Papa está sentado erguido en una silla, trabajando y bromeando como de costumbre. Alfieri dijo que cuando uno de los médicos saludó al Papa diciendo “Hola, Santo Padre”, él respondió con “Hola, Santo Hijo”.
Cuando un periodista les preguntó cuál era su mayor temor, los médicos señalaron que existe el riesgo de que los gérmenes en el tracto respiratorio del Papa puedan entrar en su torrente sanguíneo, causando sepsis.
El Dr. Alfieri dijo, sin embargo, que estaba seguro de que el Papa Francisco dejaría el hospital en algún momento y regresaría a la Casa Santa Marta en el Vaticano, con la condición de que cuando lo haga, sus problemas respiratorios crónicos seguirán presentes.
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